Atrapados en el mar tras el apocalipsis

La ficción combina el drama, la comedia, el amor y el misterio bajo un marco de aventuras trepidantes. Se trata de uno de los estrenos más esperados de la temporada, no sólo por la novedad que presenta en cuanto a la ficción –con un argumento totalmente original–, sino también por el enorme trabajo técnico que hay detrás de la serie.

Únicos supervivientes
«El Barco», de los creadores de «El Internado» y «Los hombres de Paco», arranca cuando una catástrofe mundial provoca un cataclismo que lleva a la desaparición de la Tierra. Con el planeta inundado de agua, la tripulación y los alumnos de un buque escuela parecen ser los únicos supervivientes. La ficción está protagonizada por rostros muy populares de la pequeña pantalla, como Juanjo Artero («El Comisario»), Irene Montalá («El Internado»), que dan vida al capitán y a la científica del buque (Ricardo Montero y Julia Wilson ), así como por Mario Casas («Los hombres de Paco») y Blanca Suárez («El Internado»), que interpretan a Ulises, un polizón rebelde con madera de héroe, y a Ainhoa, la hija del capitán. Entre ellos surgirá la química y serán una de las parejas que más juego den en este particular encierro. Otro de los miembros de la tripulación es Luis Callejo, que interpreta a De la Cuadra, el Primer Oficial, un personaje amargado, pero muy leal, que aprenderá mucho de la convivencia. El toque tierno y «rarito» los pondrá Iván Massagué, que encarna a Burbuja, un marinero que toma su nombre precisamente de una burbuja que quedó alojada en su cerebro tras un accidente. Juan Pablo Shuk se pondrá en la piel de Gamboa. De formación militar, llega al barco con oscuras intenciones y tendrá no pocos enfrentamientos con el capitán. De la cocina se encarga Neus Sanz, en el papel de Salomé. Los alumnos del buque-escuela son Javier Hernández (Piti en la ficción), que entra en el barco para ligar. Junto a él, Bernabé Fernández (Andrés Palomares), que estudia para sacerdote; Giselle Calderón (Estela), una joven lenta para los números pero con un enorme corazón; David Seijó (Ramiro), un luchador con una minusvalía, y Marina Salas (Vilma), que llega embarazada a la nave. Patricia Arbues es la narradora de la serie y encarna a Valeria, la hija menor del capitán.


Helicópteros, ultraligeros y zodiacs
Todo el protagonismo de la puesta en escena recae sobre la goleta en la que está rodada la producción, la «Cervantes Saavedra». Los actores se desplazan periódicamente a Valencia, donde está el barco original, para rodar las escenas exteriores, y se tienen que enfrentar a las dificultades de trabajar en alta mar. El despliegue de producción para rodar es espectacular porque para grabar en el exterior del barco es necesario contar con un equipo formado por helicópteros, ultraligeros y zodiacs. Un plató de 1.800 metros cuadrados reproduce una nave de cuatro plantas donde se graban las escenas que se desarrollan en el interior. Además, según Álex Pina, director ejecutivo de la serie, «los efectos especiales son un punto fuerte, gracias a un gran trabajo digital».