Cataluña obvia un año más la conmemoración de la Constitución

Un año más, la conmemoración del referendo que dio vida a la Constitución ha pasado desapercibida en Cataluña. Por poner un ejemplo, algunos autobuses, ni mucho menos todos, lucieron dos banderas por Barcelona, como en fechas señalas. Pero ni rastro de la española, sólo la catalana y la barcelonesa ondearon en lo alto de los buses. Tampoco en los actos institucionales en Madrid hubo representación del Govern.

Pero la Carta Magna sí tiene quien la reivindique en Cataluña. Las nuevas generaciones del PP organizaron su tradicional homenaje a la Constitución, en el que participó el secretario de los populares en Cataluña y el diputado en el Parlament Pere Calbó. Durante la celebración, los jóvenes populares regalaron a los transeúntes ejemplares de la norma suprema española en plaza Catalunya. Satisfecho y entusiasmado por los buenos resultados cosechados por el PP en las últimas elecciones –los mejores de su historia en Cataluña–, el presidente de las Nuevas Generaciones del PP, José Antonio Coto, resaltó que gracias a la Constitución «se han logrado los mejores años de la democracia en términos ecónomicos y sociales».

Superar la crisis, generar empleo y defender las libertades y los derechos de los ciudadanos son precisamente algunos de los ejes principales de la política del PP. Calbó señaló asimismo que los populares velarán por un Estatut plenamente constitucional y por el cumplimiento de la Carta Magna, «una norma de referencia que hemos de poner en valor, sobre todo cuando hay partidos que se dedican a vilipendiarla». Una norma que «ha permitido el periodo de autogobierno más importante de Cataluña», argumentó Calbó.

«Nos gustaría que el año próximo pudiéramos celebrar la Constitución en un acto institucional en el Parlament», instó Jordi Cañas, diputado de C's, partido que también conmemoró el 32 aniversario de la Carta Magna.

Tanto Calbó como Cañas coincidieron en lamentar la ausencia del presidente de la Generalitat en funciones, José Montilla, en la celebración institucional en el Congreso de los Diputados. Es el primer año en que Montilla no asiste porque ha preferido descansar tras las elecciones.