Miguel Carcaño seguirá en prisión «por el evidente riesgo de fuga»

En un auto de nueve páginas emitido el pasado 7 de marzo, al que tuvo acceso Europa Press, la Sección Primera de la Audiencia Provincial rechazó de esta manera el recurso de apelación planteado por la defensa de Carcaño contra el auto por el que el juez de Instrucción número 4, Francisco de Asís Molina, acordaba prorrogar dos años más la situación de prisión provisional.
Según recordó la Sala, la abogada de Carcaño recurrió la prolongación de la prisión «por entender que no existen indicios de su participación» en los delitos de asesinato y agresión sexual que se le imputan, «y aunque no niega que sea el responsable de la muerte de la menor, estima que nos hallamos ante un homicidio imprudente». No obstante, la Audiencia consideró que la alegación «no puede prosperar, por cuanto la parte recurrente obvia que Miguel ha admitido haber violado y dado muerte a la menor, aunque haya ofrecido distintas versiones de lo acaecido».

La Audiencia estimó que «existen otros indicios racionales que abonan que fuese el autor de los hechos», punto en el que recordó las declaraciones del menor conocido como «El Cuco» y de Samuel Benítez, «que aunque contradictorias también lo inculpan», así como la declaración del vecino y su novia que vieron al asesino confeso «en el portal de León XIII portando una silla de ruedas». Además, citó la posterior intervención de la silla de ruedas en el domicilio, «en la que se evidenciaron restos biológicos de Marta, evidencias biológicas que fueron detectadas en la cazadora que esa noche llevaba Miguel; en el tensiómetro que se describe utilizado para asegurarse de que la menor se hallaba sin vida; en la cama y en el dormitorio».

La Audiencia indicó que los hechos por los que Carcaño está imputado pudieran ser constitutivos de sendos delitos de asesinato y violación «que conllevan penas elevadísimas que por sí mismas implican un evidente riesgo de fuga, sin olvidar que el cuerpo de la víctima no ha sido hallado a pesar del tiempo transcurrido, ni que tampoco ha facilitado datos que permitan dar con su paradero, lo que ha dificultado y alargado la investigación de manera infructuosa, y sin que tal actitud pueda calificarse de colaboradora».

«Todo ello ha agudizado el profundo sufrimiento y la gravísima aflicción» de la familia de la víctima, puesto de manifiesto «por la necesidad de tratamiento, con lo que ello conlleva de desprecio de su dolor», incidió la Audiencia, que ha fijado la vista para debatir los recursos contra el auto de procesamiento el 23 de marzo en la nueva tramitación del caso ante un tribunal profesional.