Vanesa Romero: «Soy alérgica a los lácteos desde pequeña»

Su rostro resulta difícil de olvidar. Unos ojos azules junto a una sonrisa que hablan por sí solos. Pero la belleza tan sólo es uno de los puntos a favor de esta joven, que se hizo con la corona de Miss Alicante con 20 años, ya que además derrocha simpatía. Vanesa Romero forma parte del elenco de una de las series cómicas de la parrilla televisiva, «La que se avecina» (Telecinco). Además, ya ha hecho sus pinitos en la gran pantalla, con dos largometrajes pendientes de estrenar. En el «Chequeo médico a...» confiesa su problema con los lácteos, que a pesar de que lo maneja muy bien porque lo sufre desde la infancia, le pone algunas trabas en los restaurantes, «ya que debo advertirlo siempre».-¿Qué es lo que nunca falta en su menú?-Fruta, siempre en verano, como es fresquita y con el calor suelo tomar más. -Dieta saludable por «exigencias del guión» o por convicción propia...-Más bien lo segundo. Yo creo que al final somos lo que comemos. De ello depende nuestro organismo y así tendremos más o menos fuerzas para el día a día.-¿Se considera esclava de la dieta?-No, porque se trata de un estilo de vida. Creo en ello y es lo mejor para mi cuerpo. Desde pequeña me inculcaron comer sano, con lo cual tampoco me cuesta.-Nunca comería…-Soy bastante «especialita» con la comida, la verdad. No soy mucho de probar cosas raras. Además, tengo un problema con los lácteos.-¿Cuál?-Alergia desde pequeña. Y por ello tengo que estar atenta a la lactosa, a las salsas... Y desde entonces he intentado simplificar mi alimentación. Además, llevo un año en que me limito mucho el consumo de carne.-¿Por qué?-Un poco desde mi punto de vista, aparte de porque me den pena los animales, es porque ahora la carne ya no es de tan buena calidad como antaño. La forma en que los alimentan los condiciona mucho. Y por ello o la comes de muy buena calidad o mejor no comerla -¿Se ha hecho vegetariana?-No, porque tomo pescado, pero sí que intento evitar la carne.-Por la alergia a los lácteos, ¿uno se hace más especialista en temas de comidas?-No sé. Lo que sí tengo un olfato increíble. Cuando voy a un restaurante y me sirven un plato sé si lleva o no nata o mantequilla... Acierto siempre, aunque el camarero diga al principio que no, pero cuando lo confirma en cocina me dan la razón. Tengo un radar estupendo.-¿Le limita mucho la lactosa?-Sobre todo en los restaurantes de cocina de autor, en los que es mejor que llame antes y les cuente mi problema con los lácteos y te adaptan la comida, pero lo llevo bastante bien.-¿Se ha llevado algún susto?-Sólo una vez, que confundí un pan «Bimbo» con leche con uno normal y quince minutos después del primer bocado tenía un montón de ronchones por todo el cuerpo. Algo raro, porque normalmente me afecta mucho más al estómago y me pongo fatal de la tripa.-¿Ha pasado por un quirófano? -Por cosas menores, vegetaciones y amígdalas.-¿Alguna vez se ha sometido a un chequeo médico completo?-Sí todos los años, vigilo mucho mi salud por precaución más que nada.-¿Se considera hipocondríaca?-No tanto, aunque sí aprensiva. Porque ves a tu alrededor a gente joven que ya tiene cánceres y enseguida que tienes un síntoma te preocupas.-¿Cuántas horas duerme al día?-Unas siete horas, ni más ni menos, porque no me sienta bien.-En su trabajo se encuentra con situaciones con mucho estrés, ¿cómo lo combate? -Voy al homeópata, por las extrasístoles, y hago ejercicio. -¿Cómo se mantiene en forma?-He pasado por pilates, yoga, meditación... Siempre según me vaya encontrando en ese momento. Porque uno necesita tener la mente despejada para concentrarse en el caso del pilates y fuerza para hacer ejercicio, porque si no te sienta peor y no sirve de nada. Intento canalizar mi energía mediante el deporte.-Ejercicio: ¿en un gimnasio o al aire libre?-Mejor fuera. Tengo la suerte de vivir enfrente de un monte e intento siempre que puedo salir a correr, coger la bici... Necesito estar muy en contacto con la naturaleza para centrarme.-¿Qué medicinas siempre a mano (bolso)?-Para el dolor de cabeza.