Damasco
Turquía envía tropas a la frontera siria
Beirut- Mientras el presidente sirio, Bachar al Asad, insiste en que su país está en un «verdadero estado de guerra», la ONU intensifica sus esfuerzos para lograr un acuerdo político que ponga fin al derramamiento de sangre. Por segunda jornada consecutiva, Damasco fue objetivo de atentados terroristas. Dos fuertes explosiones en el aparcamiento del Palacio Judicial provocaron el pánico en la capital siria, un día después de que otra potente bomba destrozara el edificio de la televisión estatal y causara la muerte de siete trabajadores.
Las autoridades sirias no tardaron en responsabilizar a «grupos terroristas» del doble atentado de ayer, que no causó víctimas mortales. El peor de los escenarios posibles en Siria parece que se ha hecho realidad. Desde el exterior también se daban señales inquietantes. Como advirtió Recep Tayyip Erdogan el lunes, Turquía reforzó ayer su frontera con Siria para impedir que se repitan incidentes como el de la semana pasada, que acabó con el derribo de un caza turco. A Ankara se le ha terminado la paciencia y movilizó lanzadores de misiles y baterías antiaéreas. El Ejército turco envió ayer 30 vehículos militares, que partieron la noche del miércoles desde cuarteles en la provincia de Hatay, para desplegar el equipo en las inmediaciones de los municipios fronterizos de Altinozu, Reyhanli y Yayladag, donde se hallan los mayores campamentos de refugiados sirios.
En Hatay se encuentran más de 33.000 sirios, además de acoger a los soldados desertores y sus familiares, entre ellos 13 generales huidos, y otros dirigentes del Ejército Sirio Libre.
Ante este preocupante panorama, el enviado especial de la ONU, Kofi Annan, propuso impulsar un Gobierno de transición que incluiría a partidarios oficialistas y miembros de la oposición para hallar una solución política al conflicto. Una idea que sólo respaldarían Rusia y China en el Consejo de Seguridad si se incluye a Asad. Pero el Consejo Nacional Sirio ya ha dicho que no negociará un Gobierno con el «rais».
Inquietud en el Ejército sirio
Aunque no se puede hablar de «desintegración» del Ejército sirio, las deserciones de soldados van en aumento. El coronel Riad al Asaad, número uno del Ejército Libre, aseguró ayer que la unidad del hermano del presidente, Maher al Asad, «se ha colapsado completamente» y «padece falta de equipamiento».
✕
Accede a tu cuenta para comentar