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Miami
Los 70 en versión plasma
En tiempos de crisis siempre vuelven las yogurteras y los remakes televisivos. El éxito está asegurado porque la mitad de la promoción ya está hecha y la nostalgia se dispara con sólo mencionar a sus míticos protagonistas. En 1991 finalizó una de las series más famosas: «Dallas». Comenzó a emitirse en 1978 como una miniserie de cinco episodios, producida por Lorimar, responsable de «Con ocho basta» y «Falcon Crest», sin el éxito asegurado. En su etapa inicial, ya contaba con el reparto que la convertiría en un crack: los patriarcas, Barbara Bel Geddes y Jim Davis; Larry Hagman, el malvado JR; Patrick Duffy como Bobby Ewing, y Linda Gray la alcohólica y maltratada Sue Ellen. Personajes que tanto juego darían con sus continuos enfrentamientos. De cinco episodios pasaron a 357, convirtiéndose en el «super soap» más impactante de la historia de la televisión. El capítulo «¿Quién ha disparado contra JR?» fue seguido por 80 millones de espectadores en todo el mundo. El inesperado éxito de «Dallas» se atribuye a la original mezcla de tres subgéneros: dinero y poder, amor y lujo y sexo y violencia. El divertido espectáculo de dos familias de multimillonarios tejanos exhibiendo lo peor de cada uno, mientras luchan por el control de los pozos petrolíferos, recuerdan a «Gigante». El mismo enfrentamiento, odios africanos e intrigas folletinescas, pero renovadas a diario, se convirtieron en el espectáculo más visto de la televisión en color, que por entonces se popularizaba en España. La crisis social hizo de «V», «Dallas» y «Retorno al Edén» un fenómeno que colapsaba el país al mediodía y en horario nocturno.
Ante la profunda crisis actual, TNT ha considerado que un remake de «Dallas» sería lo adecuado para sobrellevar la crisis del estudio. Volverán en 2012 JR, Sue Ellen y Bobby, pero la historia se centrará en sus descendientes, dejando en suspense quién será el malo malísimo del remake.
ABC también anuncia, treinta años después de su despedida, el remake de «Los Ángeles de Charlie», la serie de acción que lanzó a la fama a Kate Jackson, Farrah Fawcett y Jaclyn Smith. Comenzó a emitirse en 1976, entre la crisis del petróleo de 1973 y la crisis económica de los años 80. Ha tenido dos versiones cinematográficas muy exitosas, con espectaculares efectos especiales, pero conservando los elementos de su éxito televisivo: una mezcla de acción inverosímil y comedia disparatada y tres chicas de acción transformadas por Charlie en infalibles agentes secretas y sagaces detectives privadas. En el recuerdo queda la fabulosa cabecera, con las siluetas de las chicas luciendo pantalones pata de elefante mientras suena la versión instrumental del éxito de Alan O´Day, «Undercover Angel». Tres mujeres de acción superpeinadas, hiperarregladas y megasexys, emprendiéndola a patadas de karate, mamporros y tiros con los criminales, y sin perder los pantys. ¿La novedad? Que la «morena» ya no es asiática, como Lucy Liu, sino afro, y que la acción se desarrolla en Miami. Quizás ABC tenga más éxito que con el remake de «V». Las lagartas posmodernas no inspiran la morbosa atracción de Diana comiéndose la rata.
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