Alberto Fabra: «El cambio del 20-N traerá una España más fuerte»

Alberto Fabra, el presidente de la Comunidad Valenciana, participó ayer por la tarde en la tribuna «La Razón de...» que organiza periódicamente este diario. En un discurso muy político, y con la vista puesta en las elecciones generales del 20-N y en Mariano Rajoy, Fabra dijo que el cambio es una necesidad urgente, no sólo para el futuro de España, sino también para el de las autonomías, que atraviesan uno de sus momentos más delicados en la democracia. «Hemos perdido referencias, calidad de vida, identificación con nuestro Gobierno...», aseguró. Y es que a día de hoy, cada vez parece más difícil que las comunidades puedan cumplir con el objetivo de déficit, entre otras razones por la caída de los ingresos porque una vez más –como destacó el líder regional valenciano– no se va a producir el crecimiento previsto por el Gobierno.

Fabra defendió que el cambio es el motor que hará más fuerte a España porque traerá confianza y ayudará a poner en marcha la recuperación económica. Ya sólo con la certificación del «cambio» en las próximas elecciones generales, y con el aterrizaje en La Moncloa de un Gobierno popular, las cosas empezarán a mejorar, según subrayó. Eso sí, dentro de ese cambio recalcó que las autonomías juegan un importante papel: «Las comunidades no somos el problema, somos parte de la solución. Tenemos que ayudar, y mucho».

El presidente valenciano hizo un severo balance de la gestión del Gobierno de Rodríguez Zapatero a partir de las cifras que deja en herencia y tomando como referente el pasado inmediato, los datos que resumen los dos Gobiernos del PP entre 1996 y 2004.

En estos años, y «por la mala gestión del Gobierno», España ha retrocedido a niveles de 1996 en lo que se refiere a paro, deuda, desconfianza o desilusión, relató. No obstante, junto a ese crudo análisis de la difícil situación económica que tendrá que gestionar un Gobierno del PP, Fabra también quiso dejar un mensaje de optimismo y de confianza en España y en las posibilidades de la sociedad española. «España tiene futuro y saldrá de esta difícil situación, igual que fue capaz de hacerlo en el 96, también con un Gobierno del PP», explicó.

La primera parte de su intervención fue la de contenido más económico, en clave nacional y autonómica. Fabra ejerció de «barón» de Rajoy y señaló la hoja de ruta que las Administraciones Públicas deben seguir para salir de la mejor manera posible, y cuanto antes, de la crisis. Habló de austeridad y de eficiencia, y como ejemplo glosó algunas de las medidas de austeridad aprobadas por la Generalitat en materia, por ejemplo, de recorte de gasto público pero, «en ningún caso», en políticas sociales, apuntó. Y anunció, además, que «vamos a reducir el numero de fundaciones en casi el 50 por ciento».

«No» a los reinos de Taifas
En un discurso autonomista, en el que se cuidó de señalar que el problema no es el Estado de las autonomías, también incluyó una sensata autocrítica de las consecuencias de una deriva hacia el esquema de los Reinos de Taifas, de tal manera que en España «hemos vivido unos años jugando a ser mini-estados». Esta imposición de la defensa de lo particular por encima del interés común sólo «genera ineficacia y crea una situación insostenible», lo que lleva a una España menos fuerte y menos competitiva.

Por eso apeló a un gran pacto de Estado que incida en la coordinación entre comunidades autónomos y que sirva para establecer una cartera de servicios comunes en Sanidad o en Educación, de tal manera que no se consoliden diferencias en los servicios esenciales en función del territorio.

A su juicio, para fortalecer la coordinación autonómica hay que rearmar el mecanismo de las Conferencias de presidentes autonómicos y que éstas dejen de ser una «foto», como ha ocurrido durante toda la etapa de Rodríguez Zapatero. Las Conferencias tienen que servir para unificar criterios y para hacer más fuerte al Estado, comentó en su intervención. «Debemos cambiar nuestra actitud de relación con el resto de comunidades. Ha llegado el momento de una reflexión compartida y coordinada para ver qué podemos hacer todos juntos por España.
La suma nos hace más fuertes».

Este discurso de la coordinación autonómica conecta con la doctrina de Rajoy a favor de una revisión del actual modelo que sirva para acabar con la duplicidad de competencias y para mejorar en eficiencia y en austeridad. El presidente valenciano avaló expresamente el programa de Rajoy, insistiendo en la importancia de revisar las competencias que ejerce cada Administración para que, en el caso de que se repitan funciones, acabe ejerciéndolas aquella institución que pueda hacerlo por menos y con mejor resultado.

En relación a la financiación autonómica, Fabra pidió que se opte por un modelo real. También aludió a los problemas derivados de la decisión del Gobierno de Zapatero de ni siquiera prorrogar los actuales presupuestos, lo que deja a las comunidades en tierra de nadie para elaborar los suyos. Fabra confirmó que su Gobierno los presentará en un ejercicio de responsabilidad, aunque también reconoció que es muy difícil elaborar unas cuentas sin conocer la participación que en el próximo ejercicio les corresponderá en los ingresos del Estado o la previsión de crecimiento económico.

En relación al 20-N, el presidente valenciano aseguró que «España necesita ese cambio» y «los ciudadanos tenemos el deber de propiciarlo». Valencia es uno de los graneros más importantes de voto popular y para estos comicios Fabra asume el compromiso de hacer crecer los votos que el PP ya consiguió hace cuatro años. Entonces fueron 1,3 millones de votos.

Rajoy volverá a Valencia en plena campaña, el próximo día 13, para participar en el tradicional mitin en la Plaza de Toros en el que el PP regional hace en cada cita con las urnas una exhibición de su poderío electoral.