El Gobierno Herrera insiste: no se recortarán los servicios públicos

Valladolid- No habrá recortes en los servicios públicos que presta la administración autonómica de cara al 2012. Lo reiteró el consejero portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, quien apuntó como un reto fundamental para el nuevo curso político la consecución de un gran acuerdo con las fuerzas políticas y sociales que sirva para «blindar» tres patas del Estado del Bienestar, que son la Sanidad, la Educación y los Servicios Sociales.
En el documento que sustentará ese pacto trabajan ya el Consejo Regional de Salud, el de Servicios Sociales y el Consejo Escolar de Castilla y León, que se reúnen hoy mismo para desarrollarlo.
Si bien De Santiago-Juárez remarcó que la prioridad es la recuperación económica y la creación de puestos de trabajo -a través de mayor apoyo a las empresas y una Estrategia de Empleo-, el Gobierno de Juan Vicente Herrera pretende abrir el pacto a todos los grupos sociales y políticos interesados, para garantizar la calidad en las prestaciones, que, incidió, avalan contrastados organismos independientes.
El portavoz incidió en que antes del 14 de octubre, fecha tope para el registro del proyecto de Presupuestos Generales de Castilla y León por parte de la Junta en el Parlamento autonómico, se conocerán las líneas generales, aunque el marco de referencia en esta ocasión serán las cuentas estatales de 2011, dado que se prorrogarán como consecuencia del adelanto electoral.

Realidades diferentes
Por otra parte, en respuesta a las preguntas de los periodistas, José Antonio de Santiago-Juárez rechazó que el anuncio de un recorte presupuestario del 20 por ciento en Castilla-La Mancha anunciado por su nueva presidenta, María Dolores de Cospedal, sea el camino a seguir por otras comunidades. A su entender, ambos territorios presentan realidades diferentes. Así, la región vecina tiene un déficit público que triplica al de Castilla y León, una deuda que más que duplica la presente aquí y una tasa de paro que «nada tiene que ver». Unos parámetros que, a su entender, son «la herencia envenenada» del anterior presidente José María Barreda, del Partido Socialista. Y es que, a su juicio, esa formación, «lleva en su ADN y en los genes el déficit y la deuda, lo que pone en riesgo el Estado del Bienestar».
Al respecto recordó el empeño histórico de los socialistas castellano y leoneses en las Cortes, que «cada año nos pedían que nos endeudásemos más»