¿Besó Jimmy Carter a la Reina Madre de Inglaterra? El secreto que el expresidente se llevó a la tumba

Rosalynn y Jimmy Carter escribieron una de esas historias de amor indisolubles. Se conocían prácticamente de siempre, se criaron juntos en Plains, Georgia, y forjaron una amistad de la que nació la pasión. Su matrimonio, de 77 años, fue el más longevo de cuantos han pasado por la Casa Blanca. Eran marido y mujer, pero también compañeros, según indicó el propio expresidente tras la muerte de Rosalynn, el 19 de noviembre de 2023, a los 96 años. Jimmy Carter falleció el 29 de diciembre de 2024, a los 100 años.

A la tumba se lleva la auténtica verdad de lo que ocurrió en mayo de 1977, durante una cumbre económica en el Reino Unido. El entonces presidente de Estados Unidos fue invitado al Palacio de Buckingham. Allí fue recibido por la reina Isabel II en compañía de su esposo, el duque de Edimburgo, y su madre, Isabel Bowes-Lyon, más conocida como Reina Madre. ¿Cómo fue el saludo con esta última? La discusión dio mucho que hablar en la prensa sensacionalista de la época. Y casi cinco década después, la verdad sigue siendo muy confusa.

Ese 7 de mayo de 1977, la cumbre económica organizada por el Reino Unido reunió a los líderes del planeta. Entre ellos, el presidente francés Valéry Giscard d'Estaing, el canciller alemán Helmut Schmidt y el 39º presidente estadounidense Jimmy Carter. Como los demás líderes de la OTAN, tuvo el privilegio de asistir al banquete real en el Palacio de Buckingham. Previamente, durante la recepción, Jimmy Carter se saltó discretamente el protocolo y tomó durante unos segundos la mano de la Reina Madre.

Si la familiaridad del presidente ya resultó sorprendente, más aún el rumor que hizo correr la prensa sensacionalista británica, citando fuentes presenciales, con la posibilidad de que Carter habría besado a la madre de Isabel II. Con los años, ella declaró a sus biógrafos: "Es el único hombre, desde la muerte de mi querido marido (en 1952), que ha tenido la audacia de besarme en los labios".

Jimmy Carter, sin embargo, lo negó rotundamente. En su autobiografía,"Una vida plena: reflexiones a los noventa", escribió que la descripción del beso por parte de los medios británicos le provocaba desazón. Confesó que sí, que hubo un beso, pero fue un ligero roce de sus labios en la mejilla, tal y como habría hecho con su abuela. Nada más. Si hubo algo más, se lo llevó a la tumba.