El pasado miércoles partía hacia tierras hondureñas Patricia Donoso, una de las concursantes más polémicas de la nueva edición de “Supervivientes” y que, seguro, va a dar mucho juego en la isla. Hablamos con ella horas antes de dejar España.

“Voy con el ánimo de hacer televisión, pero no tengo intención de ser una mosca cojonera, no quiero peleas innecesarias, llego de buen rollo, porque bastante mal lo vamos a pasar allí como para complicarme más la vida. Eso sí, pienso dar espectáculo, porque sé que el público lo espera de mí… sin hacer sangre”.

-¿Tu “amigo” Ortega Cano tendrá motivos de preocupación por lo que puedas hablar de él?

Éll sabe perfectamente lo que hubo entre nosotros y yo contaré lo que crea que debo contar. No me va a dejar por mentirosa. En el fondo, ese señor me da pena, le tuve que ayudar… y no entiendo por qué me negó.

-¿Vas a unir esfuerzos con Gema Aldon, otra enemiga del torero?

No la conozco en persona. Según como me trate, la trataré yo a ella.

-¿Qué opina tu marido de que entres en este reallity?

Está feliz, porque va a poder irse de fiesta todos los días durante los tres próximos meses, (ríe). No, mentira, se marcha a Estados Unidos para atender sus asuntos personales.

-¿Te asustan las carencias que encontrarás en Honduras?

No siento temor, el miedo es tu peor aliado. Soy consciente de lo que me espera en la isla, y si en algún momento pienso que no doy de sí todo lo que debo, seré la primera en decir adiós.

-¿Concursas para vivir una nueva experiencia o por dinero?

Evidentemente, más por dinero, porque me pagan muy bien. No iba a ir gratis. Mucha gente sueña con entrar en este reality y no lo consigue. Yo ya estoy dentro. Mira, el dinero siempre viene bien.

-¿Que contestas a los que te tachan de oportunista?

Que dejen la envidia, los pobres son muy resentidos. Y no me refiero a los pobres de dinero, sino a los de cabeza y de espíritu.

-¿A cuál de tus compañeros de programa consideras mayor rival?

No le tengo miedo a ninguno, mejor será que ellos tengan cuidado conmigo. Soy como Donald Trump. Si estuviera en la presidencia, Putin no se habría atrevido a hacer nada en Ucrania, porque los dos son igual de locos y el ruso pensaría que el norteamericano es capaz de quemarle el país.

Cuando regrese del concurso se planteará si “sigo colaborando en 'Sálvame' o me marcho a mi casa de Miami. De todas formas, mi marido y yo vamos y venimos a los dos países con una cierta frecuencia. No es un problema vivir en un avión”.