José Luis Martínez-Almeida y su esposa, Teresa Urquijo, han llegado por fin a Madrid, tras haber paseado su amor y reciente matrimonio por las Maldivas y Bután. Su luna de miel de ensueño no iba a durar por siempre, pues los compromisos con la Comunidad no cesan, al igual que tampoco lo hace el trabajo como analista de inversiones de Merlin Properties. Pero parece que este alto en su ajetreada rutina les ha sentado a las mil maravillas. Al menos eso se desprende de las primeras imágenes captadas de los recién casados a su llegada al aeropuerto Adolfo Suárez Barajas de Madrid, donde han presumido de piel bronceada bajo el exclusivo sol que les ha acompañado y con una sonrisa de oreja a oreja.

Así ponen punto y final a los faustos que tenían preparados para unirse en matrimonio, algo que se materializó el pasado 6 de abril en la madrileña iglesia de San Francisco de Borja, ante 500 invitados. Entre ellos, destacaban miembros de la Familia Real española, que acudían a la cita al ser familia directa de la novia, así como aristócratas, la cúpula del Partido Popular, representantes del mundo de la empresa y también rostros conocidos del papel cuché. Después, tras reponer fuerzas tras la ingente boda que paralizó la capital y en la que estaban puestas todas las miradas nacionales, emprendieron el viaje que les ha llevado durante diez días a afianzarse en su nueva faceta, como marido y mujer.

El alcalde de Madrid no dudó en llevar él mismo las maletas, mientras que su esposa le acompañaba sonriente, aunque adelantando el paso y marcando el camino. Lo hacían mucho más morenos, demostrando que han aprovechado los días para tostar su piel al sol, además de hacer turismo por Maldivas y Bután. No estaban solos en el aeropuerto, pues en las imágenes aparece también Victoria López-Quesada, hija mayor de Cristina de Borbón-Dos Sicilias y Pedro López-Quesada, que acudió a recogerlos y llevarles a casa. Un bonito gesto que seguramente agradecieron tras el largo viaje y el cansancio acumulado y que podrán corresponder en tan solo unos meses, pues Victoria también prepara boda para el próximo mes de septiembre, siendo el afortunado Enrique Moreno de la Cova Ybarra.

Con su característico sentido del humor, José Luis Martínez-Almeida no dudó en bromear con los gráficos que le aguardaban a las puertas de las llegadas del aeropuerto de Madrid. Con una sonrisa imborrable en el rostro, agradeció la espera de los fotógrafos y puso rumbo a su residencia, ansioso por asentarse y retomar la rutina, pero sin olvidar los buenos momentos que ha vivido durante su luna de miel. Entre ellos, su propio cumpleaños y es que el alcalde sopló las 49 velas de su tarta en pleno viaje, en pleno paraíso, como así quiso inmortalizar su esposa, Tere Urquijo, que aprovechó las redes sociales para felicitarle y, de paso, colarnos en su viaje de novios. Una instantánea a modo de selfie que demuestra el feliz momento en el que se encuentran los recién casados.