Este jueves 29 de agosto, Daniel Sancho conocía su nada esperanzadora sentencia: cadena perpetua, por el asesinato premeditado del cirujano Edwin Arrieta. Actualmente ha sido derivado este viernes a la cárcel de Surat Thani, situada en territorio continental, según indican varias fuentes. El propio preso había indicado a Efe horas antes que el traslado se haría "de forma inmediata". Sin embargo, le esperaría un destino mucho peor: la prisión de Bang Kwang, El Gran Tigre, considerada como una de las más peligrosas de Tailandia.

El hacinamiento, la agresividad y la desnutrición

Las condiciones en este centro penitenciario, construido para albergar a los delincuentes más conflictivos, son infrahumanas y vulneran los derechos humanos. Tal y como informó el periodista José Luis Torá en 'La Sexta', tiene una capacidad para 3.500 personas, en la que viven "un número indeterminado de personas, que rondan los 7.000", ha especificado el periodista. Sus celdas miden cuatro metros y en ellas "viven hacinados y en condiciones infrahumanas hasta 30 presos". A su vez, Torá ha informado que la mayoría de reclusos portan "armas u objetos punzantes para tener un sitio donde dormir cada noche o mantener su seguridad cada día".

Asimismo los presos suelen disponer de un único cuenco de arroz al día, lo que ha llevado a niveles alarmantes de desnutrición entre la población carcelaria. La combinación de hambre, violencia, enfermedades y falta de asistencia ha generado esa tasa de mortalidad del 25% cada dos años.

Las condiciones actuales de Sancho

Ciertamente el panorama actual es complicado para el hijo de Rodolfo Sancho. Para evitar el peor de los escenarios, la defensa presentará dos recursos. Al ser ciudadano español y al contar España un acuerdo de trasferencia de presos con Tailandia, Sancho podría cumplir tan solo parte de su condena en una institución penitenciaria del país asiático, pero las fechas de su traslado serían oscilantes: por un lado, se ha conocido que tiene que cumplir, al menos, ocho de años de la condena en Tailandia, aunque también tendría que cumplir con la responsabilidad civil y pedir perdón.