El productor televisivo José Luis Moreno tiene mañana una cita ante el juez de la Audiencia Nacional que le investiga por una supuesta macroestafa que acarreó su detención en junio del pasado año en el marco de la “operación Titella”. Será la primera vez que dé su versión ante el instructor (de hecho, acudirá de forma voluntaria, dado que fue él mismo quien pidió declarar al magistrado), pues en su primera comparecencia judicial se acogió a su derecho a no declarar.

Fuentes próximas al empresario aseguran que Moreno está tranquilo -”con la tranquilidad que da la verdad”- y tiene “intención clara” de contestar mañana “a todas las partes” personadas en el procedimiento, y no únicamente al juez Ismael Moreno y a la Fiscalía. “No hay nada que ocultar”.

El productor televisivo, insisten esas mismas fuentes, “sigue creyendo en su inocencia, y más a raíz de todo lo que se ha publicado sobre él”. “Se ha llegado a decir incluso que estaba al frente de una organización dedicada al tráfico de drogas...”, se quejan fuentes de su entorno.

Durante estos meses, Moreno ha preferido guardar silencio. Y lo justifican: “No ha querido hacer ningún tipo de declaración publica porque considera que es ante el juez ante quien debe dar todas las explicaciones para demostrar que no hay nada ilícito en su conducta”. Y es que para él, recalcan, sería “ir a los platós sería una falta de respeto a la investigación judicial”.

Objetivo: suavizar las cautelares

El productor televisivo -investigado por delitos de asociación ilícita, blanqueo, estafa, falsedad documental, fraude fiscal e insolvencia punible- defiende que las empresas bajo sospecha en la instrucción “existen, tienen una actividad lícita, así como trabajadores, y su actividad es real”, al contrario de lo que sostiene la Fiscalía. Algo que pretende acreditar aportando diversa documentación a la Audiencia Nacional.

En libertad bajo fianza -tuvo que aportar tres millones de euros mediante una garantía hipotecaria-, el juez le tiene prohibido salir de España y le obliga a comparecer semanalmente en un juzgado. Unas medidas cautelares que Moreno tiene intención de intentar suavizar tras su declaración judicial, por lo que previsiblemente tras su declaración reclamará al instructor que suavice esas medidas, rebajando esa fianza o incluso dejándola sin efecto.

Moreno no contempla un posible endurecimiento de las medidas que restringen su libertad de movimientos, y de hecho valoran que el juez “le haya permitido viajar al extranjero” tras solicitarle permiso, lo que consideran indicativo de que no aprecia riesgo de fuga.

“Gravísimos perjuicios personales y profesionales”

Eso sí, las fuentes consultadas hacen hincapié en que la investigación judicial “le ha ocasionado gravísimos daños y perjuicios en todos los ámbitos de su vida, tanto en la personal y familiar como en la profesional”.

En el escrito en el que solicitó declarar ante el juez, Moreno calificaba toda la investigación como un “error tremendo” pues en su opinión las acusaciones no han sido capaces de aportar “un solo indicio racional de criminalidad” más allá de conjeturas.

Entre otras actuaciones supuestamente ilícitas, Moreno está en el punto de mira por haber estafado supuestamente 40 millones de euros al empresario argentino Alejandro Roemmers, su socio en Dreamlight, impulsora de la serie televisiva Glow and Darkness (Resplandor y tinieblas), una superproducción que el ventrílocuo anunció en marzo del pasado año pero que todavía no se ha estrenado.