Belén Esteban alcanzó los 49 años el pasado 9 de noviembre y lo celebró por todo lo alto con una fiesta en el mítico Teatro Kapital de Madrid. Allí se dieron cita cientos de amigos y seres queridos de la de Paracuellos, incluidos compañeros de ‘Sálvame’ como Carlota Corredera, Lydia Lozano o Carmen Borrego. En cambio, Jorge Javier Vázquez no pudo estar presente en ese momento tan especial para su amiga, y para resarcirla le ha hecho llegar un carísimo regalo que ha llenado de ilusión a la tertuliana. Se trata de unas llamativas botas de piel de becerro negras de la firma Versace.

Se trata de unas botas de inspiración punk que forman parte de la nueva colección de la firma de lujo italiana y que encajan a la perfección con el estilo de Belén Esteban. Los zapatos, además, pueden encontrarse también en color caramelo y están decorados con un llamativo imperdible dorado en su parte superior. Lo cierto es que el diseño resulta de lo más atractivo, pero, por desgracia, no está al alcance de todos los bolsillos, y es que Jorge Javier se ha gastado casi 1.100 euros en este carísimo regalo para Belén Esteban. Ya saben lo que dicen: la amistad no tiene precio...

Con la ilusión de una niña pequeña, Belén Esteban se ha mostrado encantada con su nuevo par de zapatos. “Muchas gracias, me encantan”, ha dicho la colaboradora de ‘Sálvame’.

Este ha sido el único de los regalos que Belén Esteban ha recibido que ha trascendido a la opinión pública, puesto que la mayor parte de los invitados a su fiesta de cumpleaños prefirieron reservarse para sí el obsequio que le habían hecho llegar. Aun así, teniendo en cuenta lo mucho que la quieren y aprecian sus amigos, seguro que la de Paracuellos no tiene queja...

Un cumpleaños de reencuentros

Uno de los episodios de la fiesta de Belén Esteban que merece ser mencionado es el reencuentro entre Carmen Borrego y Terelu Campos en el Teatro Kapital. Las hermanas llevan enfrentadas desde hace semanas, pero fueron capaces de bajar la guardia en un momento tan especial para la tertuliana de ‘Sálvame’. Se saludaron con dos besos y, según la benjamina de María Teresa, se dieron cuenta de lo mucho que se querían con solo mirarse a los ojos.

Es posible que aquel fuera el primer paso hacia una reconciliación, y no habría mejor regalo para Belén Esteban que saber que su fiesta sirvió para que dos hermanas puedan hacer las paces.