El antes y el después de «Mr. Wonderful»

Nadie toca a la princesa del pueblo. Los productores, el director y el equipo en general del «biopic» de Diana de Gales hacen acopio de material de defensa estos días, pues se enfrentan a una opinión pública británica dispuesta a hacer «moving» a la película. Ya lo ha experimentado su protagonista, Naomi Watts, que el miércoles se levantó en mitad de una entrevista de la BBC, no se sabe si indignada ante las preguntas inquisitivas del locutor. Y la presión viene de todos los frentes: a pesar de que ayer por la noche fue su premiere en Londres y de que no llegará a las pantallas de cine hasta mediados de este mes, muchos ya tienen su opinión formada. Y una de las críticas con mayor peso viene del personaje que ha inspirado la película, Hasnat Khan, el que fue amante de la princesa durante dos años, un cirujano cardiovascular de origen paquistaní del que Diana estuvo locamente enamorada. «La película estaácompletamente equivocada y basada en crueles mentiras», sentencia tajante «Mr. Wonderful» (Señor Maravilloso).

«Diana» se centra precisamente en el romance entre la princesa y el cirujano. «No entiendo de dónde han podido sacar la información. Está basada en cotilleos, declaraciones de amigos de Diana y de algunos familiares míos que no tenían mucha idea. Yo nunca revelé nada, ni a los más cercanos», insistió atónito Khan durante una entrevista con SkyNews. Al cirujano siempre le espantó la atención mediática que recibía la princesa, uno de los puntos candentes en la pareja, y llegó a asegurar en una de las pocas entrevistas que ha concedido que, en el caso de que se hubieran casado, habrían ido a vivir a Pakistán por el circo que siempre la rodeaba. Y es que el segundo amor del médico que robó el corazón de Diana es su profesión, algo que él creía incompatible con el día a día de ella en Inglaterra.

Un matrimonio concertado

Hasnat Khan es hoy un hombre dieciséis años mayor que ha dejado que su gusto por la cerveza Guinness y los cigarrilos hagan mella en su porte de «Mr. Wonderful». Satisfecho con su trabajo en el departamento de cardiología de un hospital de Essex, accedió en 2006 a un matrimonio concertado por sus padres con una prima lejana suya, Hadia Sher Ali. Con este enlace su familia esperaba que el recuerdo de Diana se alejase, pero, dieciocho meses después, el matrimonio se separó. La siguiente relación seria que tuvo el doctor fue con una compañera de trabajo 21 años menor que él. Varios diarios británicos especularon en 2009 con una boda después de que la madre de ésta confirmase el compromiso.

La lealtad de Khan a la memoria de su amante ha perdurado a lo largo de los años. Uno de los ejemplos más llamativos fue la misa de acción de gracias a la que Harry y Guillermo le invitaron. Khan sabía que la hoy duquesa de Cornwall, Camilla Parker Bowles, iba a asistir, así que optó por declinar la amable oferta, como también lo hicieron algunos de los amigos de Diana. También la ha defendido en la Prensa. En 2012, la escritora Penny Junor publicó una nueva biografía en la que acusaba a Lady Di de ser una madre manipuladora con sus hijos y mentalmente enferma. «No hay nada malo en esperar que tu marido te sea fiel y enfadarte cuando no lo es», dijo en una entrevista con el «Daily Mail» en la que también reveló que Diana siempre sospechó que el príncipe Carlos seguía viendo a Camilla durante su matrimonio. Khan saca las zarpas ahora:«No pienso ver la película, pero sí he contemplado los anuncios y pósteres promocionales y, claramente, no se acercan a la verdadera Diana».

UNA PREMIÈRE DE ALFOMBRA ROJA

Llegó y deslumbró. Fue una apuesta segura: un espectacular vestido blanco con unos sugerentes tirantes cruzados y una gran apertura que dejaba ver su estilizada pierna izquierda. Naomi Watts pisó con fuerza la «red carpet» de la plaza Leicester de Londres, donde tuvo lugar anoche la première del polémico film sobre el último amor de Diana de Gales, que llegará a los cines el 20 de septiembre. Aunque no ha sido bien acogida por la crítica, la presentación de anoche congregó a cientos.