Cayetano: «A lo mejor me enamoro en este viaje»

Aunque ahora camine con dificultad –el diestro se recupera de una operación de peroné, que se fracturó en su reciente visita al programa «El Hormiguero 3.0»–, mantiene un buen estado de forma. El suficiente como para embarcarse en un viaje solidario con tintes pseudoliterarios: como Willy Fog realizará su particular vuelta al mundo en 80 días sin la intención de emular al personaje de la novela de Julio Verne, aunque como él esté acompañado de un bastón. «Tenía un deseo y ya se ha convertido en una realidad», afirmó Cayetano Rivera, un hombre al que no se presupone mala voluntad con la prensa aunque sea parco de palabras y sus respuestas sean casi telegráficas. Rivera se embarca en esta aventura –que será convenientemente divulgada a través de su revista de corazón preferida, que también se ha implicado en el proyecto al formar parte de los patrocinadores– en un ejercicio de solidaridad activa, ya que el fin último de esta vuelta al mundo es dar a conocer a los españoles las situaciones de extrema pobreza que viven muchos niños del mundo, recaudar fondos para la Fundación Yo Niño, y concienciar a los ciudadanos. «Es evidente que tengo toda la ilusión del mundo, siempre me ha interesado poner mi granito de arena para ayudar a la infancia, pero hasta ahora, por circunstancias de la vida, no me he podido plantear un viaje tan largo. Ahora sí que puedo hacerlo», afirmó, después de comentar que se ha costeado él mismo los gastos de viaje. Como si estuviera bajo secreto de sumario, Cayetano Rivera no desvela los sitios que va a visitar aunque el itinerario ya esté planificado al detalle.

Visita a colegios y orfanatos

Prefiere que sea una sorpresa, aunque sí que avanzó que, por aquello de hacerle un guiño a la célebre novela, estará en Londres que, presumiblemente será el punto de partida hacia el resto de continentes. Allí intentará, algo que no será sencillo, pasar a un segundo lugar para dar todo el protagonismo a los niños. Para ello, visitará orfanatos, colegios, fundaciones y ONGs que estén implicados en proyectos de educación. «Lo que quiero transmitir es que aun hay esperanza. Aunque algunos menores están viviendo situaciones muy críticas, hay gente que está haciendo grandes cosas por ellos».

En una de las etapas del viaje –está aún por saber cuál será exactamente– Cayetano estará acompañado por todos sus hermanos y, conviene subrayar en rojo la palabra todo, ya que es la primera vez –así lo confirmó el diestro– «que Fran, Julián, Kiko y yo realizaremos un viaje juntos», algo que, aunque él no lo quiera, tendrá bastante morbo, ya que, al parecer, durante la Semana Santa sevillana, Fran y Kiko han escenificado no ya que su relación sea fría, es que es gélida, ya que ni siquiera han intercambiado un saludo al menos de cortesía. Cayetano ni lo afirma ni lo niega. Hablar de su vida privada y alrededores no estaba en su agenda informativa de ayer, algo que ya es habitual. Sobre su estado amoroso. Bien, gracias. Solo y sin incertidumbres a la vista. Si hay posibilidades de enamorarse en un futuro, concretamente en este viaje, como le preguntó un periodista, de nuevo dejó sin despejar la incógnita: «nunca me ha llegado el amor en un viaje, pero todo puede suceder». Mientras tanto, tendrá que conformarse con compartir esta ruta con sus hermanos y algunos amigos que han querido compartir este viaje solidario con él.

Rivera, que no puede ser más tímido, se embarcó ayer mismo en este viaje. Antes quiso despedirse en la sede de la Comunidad de Madrid, donde fue recibido por el presidente, Ignacio González, que le deseó lo mejor. «Va a ser un éxito, seguro», afirmó después de expresar todo el apoyo del gobierno regional que preside a este proyecto «del que sólo podemos sentirnos orgullosos». Junto a él posó junto al simbólico kilómetro cero, al que regresará, si todo sale según lo previsto, el próximo 10 de julio.