El mal de amores de Froilán se llama Belén

Pura cabezonería. Froilán insiste en en romper las reticencias de la influencer Belén Perea de caer en sus artes amatorias. Erre que erre, el hijo de la infanta Elena corteja a esta zaragozana de 25 años, que, de momento, no se deja querer.

Es cierto que les han pillado juntos saliendo de un restaurante en Madrid, pero más parece un tanteo, o un tonteo, que una relación formal.

Belén Perea, que así se llama la chica en cuestión, estudia Marketing en la capital madrileña, hace prácticas en SM Marketing Studio, ejerce de influencer y modelo y cuenta con cincuenta mil seguidores en su Instagram, entre ellos, el mismo Froilán, su hermana, Victoria Federica y Alejandra Rubio.

Curiosamente, Froilán conoció a Belén en el mismo lugar que a la que se considera su última novia oficial, Mar Torres, en el internado de Siguenza en el que estudiaban los tres.

Por tanto, las dos chicas han mantenido algún trato entre ellas, aunque dicen que Mar se ha enterado de los flirteos de Pipe, como llaman al que fuera su novio en la intimidad, por las imágenes de los dos aparecidas en una revista. Y se llevó una gran sorpresa. No se lo esperaba.

Pero puede estar tranquila, porque Froilán, se rumorea, sufre mal de amores por lo difícil que se lo está poniendo Belen. Y mira que el chico insiste, aunque sus instrumentos de seducción, por lo que se ve, no obtienen a día de hoy los resultados esperados