La Reina Sofía viaja a Atenas desde Oviedo para la gran boda griega de su sobrino Felipe

A estas horas de la mañana, la Reina Sofía ya debe haber llegado a su Grecia natal o está a punto de hacerlo. El motivo no es otro que la boda de su sobrino Felipe de Grecia, que se dará el ‘sí, quiero’ con Nina Flohr, la hija de un importante magnate suizo. Junto a ella estará también la infanta Elena, que confirmó la asistencia a la celebración. La presencia de la emérita en las nupcias alimentó los rumores de que podría faltar a los Premios Princesa de Asturias, un cita ineludible para ella en los últimos 40 años, pero la buena organización de su agenda le ha permitido asistir a los dos actos sin problema.

Ayer se la vio en Oviedo junto al resto de la Familia Real, intercambiando muestras de cariño con sus nietas. Cuando la princesa Leonor y la infanta Sofía vieron a su abuela, se fundieron con ella en un tierno abrazo y se besaron como muestra de la buena relación que hay entre ellas. Además, cuando la heredera al trono finalizó su tradicional discurso, la Reina Sofía volvió a darle un beso y un abrazo en señal de aprobación y orgullo. Ya en Atenas, los Reyes Felipe y Letizia continuarán con la agenda de actos programados enmarcados dentro de los Premios Princesa de Asturias.

La coincidencia en el tiempo de tan importante evento para la Casa Real ha impedido a la Reina Letizia y al Rey Felipe acudir a la boda de su primo hermano, con quien mantiene una excelente relación. Pablo de Grecia, hermano del novio, estudió con nuestro jefe de Estado en el extranjero y compartían habitación, formando así un intenso vínculo que todavía permanece. Sin embargo, la situación en los últimos años se ha vuelto algo tensa a consecuencia de las tiranteces existentes entre la consorte y Marie Chantal, esposa de Pablo, quien dedicó palabras muy poco amables a Letizia cuando se produjo el infame rifirrafe entre ella y su suegra en la Catedral de Palma de Mallorca en 2018.