Novela
“¡Aunque a veces nos vienen los años torcidos... que nos sigan cayendo!
El mensaje de Ernesto para felicitarla por su 56 cumpleaños revela que Blanca vivía su año más difícil.
Si hay una persona que llora la muerte de Blanca Fernández Ochoa al margen de sus familiares más directos es la que fuera su última pareja: Ernesto Montes. Con él hablamos en exclusiva minutos después de que se confirmara que el cadáver aparecido en La Peñota era el de la esquiadora. El golfista y alpinista aficionado que inculcó a Blanca su pasión por estos deportes y con él que había compartido los últimos cinco años de su vida, está destrozado tras conocerse que la muerte no fue accidental.
Ernesto y Blanca han mantenido una relación sentimental durante casi cinco años. La pareja se conoció a través de una de las hermanas de Blanca que pertenece a su círculo de amigos en 2014. La ruptura se sitúa a principios de año pero pese al distanciamiento, continuaban manteniendo contacto y seguían siendo amigos en las redes sociales.
Así, el pasado mes de abril, con motivo del último cumpleaños de la deportista, Ernesto la felicitó virtualmente, dejando constancia del afecto que sentía aún por ella. Eran momentos difíciles para la esquiadora ya que según ella misma confesó a su círculo más cercano “estoy pasando el eslalon más duro de mi vida, pero hasta éste lo voy a ganar.”. En su mensaje de felicitación, el propio Ernesto parecía ser consciente del complicado momento que vivía su ya ex novia: “Blanquita cariño, Feliz cumpleaños!!!! Aunque a veces vienen los años torcidos, que nos sigan cayendo!!!! Mil besos !!!!!!”-le decía entonces Ernesto.
Pero estas palabras, además ponen de manifiesto que el golfista sabía de los problemas que atravesaba a nivel afectivo y emocional la que había sido su pareja. Blanca no acababa de superar la ruptura ya que, según sus propias palabras, en Ernesto había encontrado una gran compañía y apoyo, y que con él había recuperado la confianza en el amor. El mensaje de felicitación se acompañaba con tres fotografías, en las que ambos posaban sonrientes en diferentes momentos de su vida en común.
Estas son las únicas imágenes que hay de la pareja, que ha vivido su amor alejada de los focos. Pero las extrañas circunstancias de la muerte de la esquiadora así como el hecho de que algunos amigos y familiares hayan reconocido que Blanca atravesaba momentos muy complicados a nivel personal, emocional y económico, convierten a Ernesto en una de las personas claves para entender cómo ha vivido Blanca estos, según sus propias palabras, últimos “años torcidos".
Y aunque nadie habla de la ruptura que desgarró el corazón de Blanca, pocos dudan ya de que en los últimos meses de su vida, la medallista olímpica vivía sus horas más bajas. Así lo confesaba su amiga Coral Bistuer que hizo público el último mensaje que recibió, el pasado marzo, de la deportista: “estoy pasando el eslalon más duro de mi vida, pero hasta éste lo voy a ganar”. El mensaje en el que Blanca reconocía pasar un duro momento personal coincidía con la ruptura con Ernesto y con la venta de la casa de Las Rozas, en la que vivía con sus hijos y desde entonces, vivía en casa de su hermana Lola.
✕
Accede a tu cuenta para comentar