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Corinna Larsen, acorralada y retratada sin piedad por su primer marido: “Es peligrosa”
Este lunes ha visto la luz el cuarto capítulo del podcast de la alemana, ‘Matar a Dumbo’
Este lunes ha visto la luz al completo el nuevo capítulo del podcast de Corinna Larsen, ‘Matar a Dumbo’. Cuarenta minutos en los que la alemana centra parte de su atención en el polémico safari de Juan Carlos I a Botsuana en el año 2012, en el emérito se rompió la cadera. Las reacciones que este escándalo tuvo en la opinión pública fueron muchas, sobre todo a raíz de su famosa disculpa ante los medios poco después de ser operado en un hospital de la capital.
Pero no solo eso, sino que ahora ha aparecido en escena Philip Adkins, su primer marido y padre de su hija Anastasia, quien también estuvo presente en aquel safari y quien se ha negado a intervenir en este podcast que se ha convertido en el más escuchado en todas las plataformas a nivel mundial. Una negativa que él mismo ha querido explicar: “Lo que dice es totalmente falso... Ella es una mujer inestable y peligrosa”, desliza.
Philip y Corinna se casaron en 1991, tuvieron a su hija, y en 1993 se iniciaron los trámites de divorcio tras no superar una gran crisis. En los años posteriores mantuvieron una relación más que cordial, y una prueba de ello es que la propia Corinna le presentó al rey Juan Carlos, llegando estos a convertirse en grandes amigos.
Tanto fue así que Philip concedía las siguientes declaraciones a Vanity Fair sobre aquel viaje que cambió sus vidas: “Fue un privilegio estar allí. Corinna, su hijo y yo pasamos unos días buenísimos en la sabana africana, lo pasamos muy bien y tenemos unos recuerdos maravillosos. Fue un accidente terrible y estar en un sitio en el que no sabes exactamente dónde está la cabina o la altura de la cama… te desorienta. Es un accidente humano y es terrible. Creo que fue muy desafortunado que el Rey se cayera y se rompiera la cadera”, deslizó entonces.
Todo eso forma parte del pasado y ahora la relación entre este trío de figuras públicas es totalmente inexistente: “España le dio a Corinna un breve momento de atención pública y ahora ella tiene que lidiar con la dolorosa realidad de ser poco interesante e insignificante... Corinna siempre ha estado muerta por dentro. No hay cirujano plástico ni banquero que pueda cambiar eso”, declaró recientemente.