Los incondicionales de José Luis Moreno buscan al “TRAIDOR” que dio el chivatazo

El empleado traidor tiene nombre y apellidos, y los todavía incondicionales de José Luis Moreno intentan ponerle cara para ajustar cuentas. Y cuando decimos lo de ajustar cuentas lo hacemos con conocimiento de causa sobre lo que le espera al hoy “desaparecido”. Una fuente cercana al ex ventrílocuo advierte que las consecuencias para quien se va de la lengua “serán muy duras”. ¿Mensaje mafioso? Eso parece. Recordemos que el empresario fue detenido ayer por liderar supuestamente una organización criminal dedicada a la estafa de forma continuada y el blanqueo de capitales.

Esa persona, dicen, ha colaborado a conciencia con las fuerzas de seguridad del Estado para desentrañar la trama delictiva que llevó a la detención del productor y otros implicados en la macro estafa. Puro rencor y odio hacia quienes, parece ser que, le engañaron y le deben una buena cantidad de dinero. Y esto no ha hecho más que empezar.

En su mismo caso hay muchos otros a los que no les pagaron sus servicios, Moreno ha ido dejando una estela de acreedores que hoy disfrutan con su detención y su desgracia. Como Ana, bailarina, a la que se le deben más de cinco mil euros desde hace años: “ese hombre nos dejó tirados. Y no hubo forma de que nos pagara…”.O José L., actor de un de las producciones del detenido, que “todavía tiene una deuda conmigo superior a los tres mil euros”.

Ahora resulta que, tras la imagen sonriente de José Luis, se esconde un lobo con piel de cordero. Le defienden muy pocos, la que más, su hermana Maritza, que se niega a aceptar la veracidad de los desafueros de Moreno y confía en que “todo se aclare pronto”.