Supervivientes 2021: Olga Moreno paga las consecuencias del ‘huracán Rocío Carrasco’

Olga Moreno es la concursante perjudicada por excelencia de la última edición de Supervivientes. Ella no partió de cero como sí hicieron la mayoría de los concursantes. Cuando el pasado mes de abril decidía poner tierra de por medio y volar hasta Honduras, su participación en el reality más extremo de Telecinco ya venía totalmente condicionada por la opinión pública.

Pese a la encerrona de la cadena para que esta no pudiese negarse a participar -a no ser que quisiera pagar una alta cifra económica de multa- Moreno decidió dar un paso al frente con el fin de mostrar lo mejor de ella en la isla. Allí lleva ya casi dos meses. Dos meses en los que ha sido líder grupal, demostrando su habilidad, fuerza y constancia en las pruebas. Casi sesenta días en los que se ha ganado el cariño de casi todos sus compañeros, diciendo y expresando lo que piensa sin faltar nunca al respeto. En este tiempo ha demostrado ser una mujer fuerte que, como todos, también se emociona y se derrumba. Una mujer que echa de menos a su familia, a su marido, y a los hijos de este, a los que ha cuidado casi desde que nacieron. Ella es conocedora en primera persona de todo lo que ha vivido, y es totalmente lícito que en las 24 horas que tiene el día también existan momentos para desahogarse sobre ello.

Todo esto pasa a un segundo plano cuando la opinión pública dice que “Olga es cómplice”, “Olga es falsa”, “Olga es mala persona”, o simplemente cuando Rocío Carrasco la sentencia sin miramientos en su documental. Muchos dicen que no se debe cuestionar absolutamente nada de lo que cuenta la hija de Rocío Jurado en los capítulos sobre su vida, sin embargo, a la otra parte (Antonio David, Rocío Flores, Olga Moreno y el resto de familiares) se les lapida y sentencia sin piedad cuando surge la oportunidad sin pensar en el daño irreparable que esto pueda ocasionar, y más en el caso de Olga, quien sin duda vivirá un complicado momento cuando regrese de su aventura en Honduras.

“Olga ha hecho trampas”, “En Supervivientes han hecho tongo para favorecer Olga”, “Olga solo habla de Rocío Carrasco” o “Olga sigue las pautas de su marido”, son solo algunas de las cosas que se leen a diario en las redes sociales. Esos usuarios nunca son capaces de ver nada positivo en ella más allá del odio que les han engendrado inconscientemente a través de la televisión. Es por eso que la capacidad de autocrítica en su caso es bastante escasa. Ya les han dicho cómo tienen que pensar y eso no hay buen acto de Olga que lo cambie.