Galleta lotus y tarta de queso, la combinación perfecta: Bea Roque te explica cómo hacerla

Las tartas de queso son uno de los postres más reconocidos dentro de la gastronomía española. Siendo honestos con nosotros mismos, son muy fáciles de hacer y su resultado es tan asombrosamente bueno que no resulta muy difícil no caer en la tentación de hacer una cada poco tiempo.

En este caso, hemos querido destacar la función de una de las galletas más icónicas y reconocibles del panorama gastronómico, y es que las galletas Lotus son muy especiales. Su textura crujiente, su sabor y aroma delatan al caramelo como su razón de ser. Verás qué sabor tan espectacular consigues con estas galletas, y en cuanto a la crema de galletas, vas a lograr una cobertura realmente buenísima.

Esta receta y más las puedes encontrar en: Todo sobre los Bundt, Bea Roque (Libros Cúpula).

Ingredientes

• 300g de queso Philadelphia
• 100g de azúcar
• 100g de crema de galleta Lotus
• 300g de nata liquida
• 100g de leche
• 8 láminas de gelatina neutra

Proceso de elaboración

Engrasa abundantemente un molde Bundt de 5 tazas con un espray especial desmoldante y extiende bien con una brocha. Déjalo reposar boca abajo sobre un papel de cocina. Tras ello, hidrata las 8 láminas de gelatina unos 5 minutos en agua fría.

Añade el resto de los ingredientes, salvo la leche, en un procesador o bate con una batidora hasta que todos los agregados estén ligados. Calienta la leche y escurre la gelatina para quitar el excedente de agua.

Tras ello, incorpora la leche con la gelatina disuelta a la mezcla del queso y bátela. Después, vierte todo el contenido en el molde y enfríalo unas 12 horas.

Para ayudar a desmoldar, sumerge un par de minutos el molde en agua tibia, solo para que el recipiente pierda el frío de la nevera. Posteriormente, separa suavemente con los dedos la tarta de queso de las paredes. Puedes agitar con cuidado para ayudarte, dale la vuelta para colocarlo en el plato y espera a que el cheesecake se suelte por sí solo.

Para terminar, ayúdate de un secador para que la forma de la tarta no se rompa. Tras secarlo, mételo en la nevera hasta su consumición.

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