Turismo

Así es la espectacular playa de Ribadeo que pocos conocen y compite con las Catedrales

Sus formaciones rocosas de tonos claros, sus aguas cristalinas y su difícil acceso la convierten en un paraíso desconocido

Playa de Rocas Blancas
Playa de Rocas BlancasA Mariña Lucense

Galicia está llena de paisajes sorprendentes, pero hay lugares que siguen siendo auténticos secretos, escondidos entre acantilados y lejos del bullicio turístico. Uno de ellos es la playa de Rocas Blancas, en Ribadeo, un rincón salvaje donde la naturaleza manda y el mar dibuja un escenario de película.

No es una playa al uso. Aquí no encontrarás largas extensiones de arena dorada ni chiringuitos. En su lugar, el terreno está salpicado de formaciones rocosas de tonos claros que, con la luz del sol, parecen brillar sobre el azul del Cantábrico. La marea juega un papel clave: cuando baja, deja al descubierto pequeñas piscinas naturales perfectas para darse un baño en aguas cristalinas. Cuando sube, cubre casi por completo la playa, transformando el paisaje en cuestión de horas.

Rocas Blancas no es fácil de encontrar ni de acceder, y quizás ahí radica su encanto. No hay carteles que la anuncien ni caminos demasiado evidentes. Hay que llegar con ganas de aventura, siguiendo senderos que atraviesan prados y bordean los acantilados. Quienes lo consiguen, se encuentran con un lugar prácticamente virgen, donde el único sonido es el de las olas rompiendo contra las rocas y el viento soplando sobre el acantilado.

Este rincón es un paraíso para quienes disfrutan de la fotografía o simplemente buscan desconectar. No hay multitudes, no hay ruido, solo la sensación de haber descubierto un pequeño tesoro que parece resistirse al paso del tiempo.

Si visitas Ribadeo y quieres algo más que la famosa Praia das Catedrais, atrévete a buscar Rocas Blancas. No es la playa más cómoda ni la más accesible, pero sí una de las más especiales. Y lo mejor de todo: sigue siendo un secreto bien guardado.