Perder peso es una de las principales metas de muchas personas, pero a menudo los esfuerzos para lograrlo no tienen éxito. Según un informe de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), el 81% de los españoles fracasa al seguir una dieta para adelgazar, a pesar de que el 76% está insatisfecho con su peso actual. Este dato refleja una creciente preocupación por la salud, pero también pone en evidencia la dificultad para alcanzar resultados sostenibles.

El nutricionista Pablo Ojeda comparte en esta ocasión los 5 errores más frecuentes que cometemos al intentar perder peso y cómo podemos corregirlos para lograr una pérdida de peso más saludable y efectiva.

1. Seguir dietas restrictivas y poco equilibradas

Muchas personas recurren a dietas “milagro” que prometen resultados rápidos, pero las dietas extremadamente bajas en calorías y que eliminan grupos alimenticios importantes (como proteínas, carbohidratos y grasas) son peligrosas. Estas dietas pueden provocar la pérdida de masa muscular y, en muchos casos, un efecto rebote, lo que significa que, al dejar la dieta, se recupera el peso perdido e incluso se gana más.

Es fundamental seguir una dieta equilibrada que incluya los tres macronutrientes esenciales. Además, se debe evitar la restricción extrema de calorías, ya que el cuerpo necesita energía para funcionar correctamente.

2. No seguir una rutina de alimentación constante

Es común que las personas intenten perder peso saltándose comidas o comiendo de manera irregular. Sin embargo, no tener horarios establecidos de comida puede llevar al cuerpo a entrar en "modo ahorro", lo que disminuye el metabolismo y provoca que el cuerpo almacene más grasa.

Ante esto, Ojeda recomienda establecer una rutina diaria de comidas es clave. Comer a intervalos regulares durante el día ayuda a mantener el metabolismo activo. Además, es recomendable consumir las comidas durante las horas de luz para favorecer una digestión óptima.

3. Marcarse objetivos poco realistas

Un error frecuente es querer perder una cantidad significativa de peso en un tiempo demasiado corto. Las expectativas poco realistas pueden generar frustración y abandonar el proceso. Según el nutricionista, una pérdida de peso saludable debe ser gradual, y el tiempo ideal para bajar entre un 10% y un 20% del peso corporal es de aproximadamente un año.

Establecer objetivos alcanzables y sostenibles. La pérdida de peso exitosa y duradera suele ser de entre 0,5 y 1 kg por semana. Este enfoque más gradual reduce el riesgo de efectos secundarios negativos.

4. Obsesionarse con la báscula

Muchos se enfocan en el número de la báscula como indicador de su progreso. Sin embargo, el peso corporal puede variar por múltiples factores, como la retención de líquidos, el nivel de actividad física o el ciclo hormonal. Obsesionarse con los cambios diarios en la báscula puede aumentar el estrés, lo que a su vez eleva los niveles de cortisol, la hormona relacionada con el estrés, que puede dificultar la pérdida de peso.

El progreso debe medirse de forma más integral. Es importante también considerar otros indicadores de salud, como la mejora de la energía, el bienestar general y la reducción de la grasa corporal, no solo el peso total.

5. No incorporar ejercicio físico

El ejercicio es una parte crucial de cualquier plan de pérdida de peso saludable. Según el nutricionista, sin actividad física, la pérdida de peso será difícil de mantener a largo plazo. Además, el ejercicio ayuda a preservar la masa muscular mientras se pierde grasa, lo que mejora la composición corporal general.

Incorporar actividad física regular en la rutina diaria es fundamental. No es necesario realizar entrenamientos intensos, pero actividades como caminar, nadar, andar en bicicleta o practicar yoga pueden ser muy efectivas para mantener el peso y mejorar la salud general.

La clave es la paciencia y el enfoque equilibrado

La pérdida de peso no debe basarse en soluciones rápidas ni dietas extremas. Como recomienda el nutricionista Pablo Ojeda, el proceso debe ser gradual, equilibrado y sostenible. La clave es mantener una alimentación equilibrada, seguir una rutina de comidas regular, establecer metas realistas, no obsesionarse con la báscula y combinarlo con ejercicio físico.

Si estás buscando perder peso de manera efectiva y saludable, recuerda que la clave está en hacer cambios sostenibles en tu estilo de vida. Un enfoque equilibrado y paciente te permitirá alcanzar tus objetivos de manera duradera.