Votación

Sumar presiona a Junts para salvar el techo de gasto

«Son 500 millones para Cataluña», advierten en el partido para retratar a Junts

En el ala minoritaria del Gobierno también asumen ya que Junts tumbará el techo de gasto que se somete a votación este jueves en el Congreso de los Diputados. El que es el paso previo para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado, es un símbolo de máxima importancia también para testar el aguante del gobierno de coalición y, si es imprescindible para el PSOE, para Sumar todavía más, en medio de su debilidad política.

La presentación de los Presupuestos Generales del Estado es una herramienta que puede otorgar al socio minoritario en Moncloa la máxima visibilidad si consigue en la negociación desbloquear los permisos de paternidad, una reforma fiscal o el impuesto a las grandes herencias, o los problemas de acceso a la vivienda.

Es por eso que, en medio de la debilidad parlamentaria y de la situación de extrema fragilidad por la que pasan las relaciones entre el PSOE y Junts, desde Sumar tratan de elevar la presión sobre Junts para que apoye el techo de gasto y no haga descarrilar la legislatura. Una estrategia que ya ha emprendido –como publicó este diario en su edición del lunes– varios de los socios de Sánchez, como el PNV y Bildu.

El ministro de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, reclamó ayer al partido de Carles Puigdemont que apoye el techo de gasto. Afirmó que es «bueno» para Cataluña y avisó directamente al partido independentista de que votar en contra es «votar en contra de que Cataluña tenga 500 millones de euros más», dijo Urtasun. De este modo, en Sumar buscan que el partido independentista se retrate, es decir que explique el motivo por el que rechaza aumentar la inversión para su comunidad. En una clara súplica a Junts, desde Sumar piden responsabilidad al partido. «Nos toca a todos los partidos estar a la altura, nos tenemos que dar una segunda oportunidad», aseguró.

Para Urtasun, votar a favor de la senda de déficit podría ser una manera de «enmendar el error» de la pasada semana. Se refiere Sumar a solventar el voto en contra de los de Puigdemont en el Congreso a la mejora de la Ley de Vivienda y que acabó tumbando la proposición que impulsó Sumar.

Esta petición en público por parte de Sumar corresponde a la necesidad de presión total sobre el partido independentista. Es por eso que ponen el énfasis en que Junts solucione con esta «segunda oportunidad» su voto en contra. Además, de esta manera, en el partido buscan desgastar a Junts al vincularle con el Partido Popular y Vox «Tienen que decidir si quieren dar mejor financiación a las comunidades o jugar a la política pequeña», lanzó Urtasun.

Sin embargo, en privado, fuentes del partido ya dan por perdida la votación económica. «Es prematuro», reconocen en la formación, alejando así un voto a favor de Junts y rebajando el efecto de la cita en Suiza del PSOE con Junts. Sumar, eso sí, no da por perdido del todo al partido catalán y cree que todavía hay «margen» para negociar y conseguir los siete votos de Puigdemont para los Presupuestos.

En Izquierda Unida, socio también de Gobierno, donde ponen el énfasis es en el PP, que es a quien presionan, al dar por imposible ya a Junts en la suma del «sí» para la votación. La responsable de organización, Eva García Sempere, exigió al PP estar a la «altura de miras». «Debe decidir si sigue esa carrera loca de intentar ser más extremo que la extrema derecha y seguir a su líder Díaz Ayuso en una carrera hacia ninguna parte, o decide comprometerse con las comunidades autónomas que gobierna y con los ciudadanos que viven en esas comunidades», presionó la dirigente de Izquierda Unida.