Ecos del pasado

¿Qué ha sido de Ciudadanos? De albergar la llave del Gobierno a tener la utilidad de "una asociación de vecinos"

El que fuera vicesecretario general de Ciudadanos dedicó unas duras palabras a su antigua formación política, que ha perdido todo tipo de autoridad política

Albert Rivera, presidente de Ciudadanos
El expresidente de Ciudadanos, Albert Rivera, en un acto del partido.larazon

En el turbulento panorama político de España, hubo un momento en el que Ciudadanos se alzó como un partido emergente con una fuerza inconmensurable, desafiando el bipartidismo tradicional entre el Partido Popular y el PSOE que durante décadas había dominado el poder.

De esta manera, Ciudadanos, nacido en Cataluña como un movimiento contra el nacionalismo, supo proyectarse a nivel nacional y convertirse en la gran promesa del centro político. Con un discurso regenerador, una imagen moderna y un liderazgo carismático con Albert Rivera, la formación naranja logró captar el descontento de buena parte del electorado que ansiaba una alternativa a los partidos tradicionales.

Hubo un instante en el que Ciudadanos pareció estar al borde de lo impensable: convertirse en una de las primeras fuerzas políticas del país y disputar el Gobierno. Las encuestas lo situaban como uno de los partidos favoritos, y su crecimiento en el Congreso de los Diputados era imparable, mientras que las alianzas estratégicas con otras formaciones le permitieron influir en el rumbo del país.

Sin embargo, el ascenso meteórico vino acompañado de desafíos aún mayores. Errores estratégicos, cambios de rumbo y la pérdida de confianza de sus votantes terminaron por arrastrar al partido a un declive en el que, lo que una vez fue una fuerza renovadora, se convirtió en una formación cada vez más irrelevante, hasta el punto de quedar prácticamente en el olvido.

¿Qué ha sido de Ciudadanos?

Ciudadanos hoy es apenas un eco de lo que llegó a ser. Los que en las ecciones generales de abril de 2019 ascendieron como la pólvora, consiguiendo 57 escaños (25 más que los logrados en 2015), cometieron el error de no aceptar un gobierno de coalición con el PSOE de Pedro Sánchez, abocando a una repetición electoral en noviembre de ese mismo año que los electores castigaron con casi medio centenar de escaños menos para la formación naranja (10 diputados durante la XIV Legislatura).

El día en el que Rivera aseguró que no pactaría "ni con Sánchez ni con el PSOE" tras las elecciones, fue el principio del fin. En ese momento comenzó la debacle de la formación naranja que, a día de hoy, más que un partido político, se asemeja a "una asociación de vecinos", tal y como declaró Edmundo Bal, ex vicesecretario general del partido, en un programa de televisión al que acudió de público.

El candidato de Ciudadanos (Cs) a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Edmundo Bal
El candidato de Ciudadanos (Cs) a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Edmundo BalMarta Fernández JaraEuropa Press

Ciudadanos desapareció del Congreso de los Diputados tras las elecciones generales del 23 de julio de 2023, pero del resto de las autonomías comenzó a hacerlo mucho antes. Tanto es así, que en la actualidad el partido político tan solo tiene representación en una de las 17 autonomías y dos ciudades autónomas que tiene España.

De esta manera, Ciudadanos sigue estando presente en las Cortes de Castilla y León, con Francisco Igea como procurador, mientras que en el resto de autonomías ha desaparecido por completo de la Cámara legislativa.

A ello, hay que sumar la migración de numerosos políticos que en su día fueron máximos dirigentes de la formación naranja a otros partidos, como es el caso del eurodiputado Adrián Vázquez (antes en Estrasburgo por Ciudadanos y ahora por el PP), o el caso de Toni Cantó, que tras su paso por Ciudadanos se unió al PP de Isabel Díaz Ayuso, para luego abandonar su cargo al frente de la Oficina del Español.

Una militancia irrisoria y una sede en una entreplanta

El debacle de la formación que, tras la dimisión de Rivera asumió Inés Arrimadas, no fue solo en las urnas. El partido que en un momento llegó a tener hasta 34.000 militantes, en la actualidad apenas posee más de 3.000 inscritos, sinónimo del rumbo del partido.

Con ello, en verano de 2023, ante el previsible batacazo electoral, y con ello la reducción de las arcas del partido, la dirección Ejecutiva de Ciudadanos decidió trasladar su sede del mítico edificio en la calle Alcalá de Madrid, próxima a la Plaza de Toros de Las Ventas, que contaba con hasta cinco pisos de oficinas, a una entreplanta de un edificio del barrio de Chamberí, desde donde siguen haciendo "política".

Fachada de la sede de Ciudadanos
Fachada de la sede de Ciudadanoslarazon

En la actualidad, Ciudadanos ha elegido hace pocos meses a su nueva Ejecutiva y centra sus esfuerzos en "recuperar el espacio político" que un día perdieron. Según detallan en su página web oficial, la formación naranja ha iniciado "una nueva etapa" con la que pretenden "fortalecer sus agrupaciones locales y el apoyo a los cargos municipales", con el objetivo de "recuperar y aumentar" su representación en los gobiernos locales, con vistas a las elecciones municipales de 2027.

Además, la formación detalla que, dada su la pérdida de representación en las instituciones, su presencia es "principalmente digital", mientras que pretenden iniciar un "crucial proceso de renovación" para recuperar la confianza del electorado de cara a 2027. Todo ello, según detallan, mediante "alianzas estratégicas con partidos afines" que les permitan resurgir de sus cenizas.