Política

Mariano Rajoy

Policías y guardias civiles en pie de guerra por la "traición"de Marlaska

Los agentes saldrán a la calle el próximo 6 de abril de la mano de Jusapol en protesta por los engaños de Interior. Asociaciones de la Guardia Civil y sindicatos policiales denunciarán a Marlaska por "irregularidades"en el proceso de equiparación

Imagen de una de las manifestaciones organizadas por Jusapol en las calles de Madrid
Imagen de una de las manifestaciones organizadas por Jusapol en las calles de Madridlarazon

Protestas en la calle de la mano de Jusapol y denuncias de los sindicatos de Policía y asociaciones de Guardia Civil contra Interior y Fernando Grande Marlaska.

Miles de policías y guardias civiles saldrán a la calle el próximo 6 de abril en Madrid de la mano de Jusapol para protestar por la “falsa equiparación” que desde Interior intentan venderles. Lasasociaciones de la Guardia Civil van a denunciar al departamento que dirige Fernando Grande Marlaskapor “irregularidades” en el proceso y desde los sindicatos policiales también setomarán acciones legales por la “opacidad” del Gobierno que se niega a dar a conocer las cifras de un informe que resolvería de una vez por todas si se está cumpliendo con la equiparación o no.

Y así están las cosas... mal. ¿Pero cómo hemos llegado a este punto? Pues para saberlo hay que remontarse a agosto de 2017, fecha en que surge Jusapol.

“No es justo que en España haya Policías de primera, de segunda y de tercera división. No es justo que las Policías más importantes y con más competencias de un país sean las que menos cobren y las que menos materiales tenga”. Una reivindicación arrinconada en el Ministerio de Interior durante más de tres décadas volvía a ver la luz gracias a una asociación que nació tras una charla en una comisaría de Palencia, Jusapol. ¿Su objetivo? La equiparación real.

Su lucha empezó en la calles y ha recorrido toda España con un sola finalidad: la equiparación real entre Policías del Estado. Un reto al que se sumaron posteriormente sindicatos policiales y asociaciones de la Guardia Civil bajo el epígrafe de “Unidad de Acción”. Una “unidad” que dejaba fuera a Jusapol y que se arrogaba todo el poder para negociar, primero con Juan Ignacio Zoido y después con Fernando Grande Marlaska.

El 12 de marzo de 2018, cuatro sindicatos de Policía y siete asociaciones profesionales de la Guardia Civil firmaban un acuerdo de equiparación salarial con Zoido, por aquel entonces ministro del Interior. Aceptaban así la oferta económica de 807 millones que le ofrecía el Gobierno para el período 2018-2020 y que distaba mucho de los 1.500 millones que desde un principio había calculado Jusapol que eran necesarios para cobrar lo mismo que un ertzaina o un mosso.

Así las cosas, en 2018 se produce lo que muchos agentes denominan un “aumento de sueldo”, ya que sus nóminas siguen muy alejadas de las de otras Policías autonómicas. Y en medio de todo este caos y con el objetivo de poder tener voz en negociaciones futuras, nacen el sindicato policial JUPOL y la asociación de guardias civiles JUCIL.

Salvado el primer escollo de este acuerdo la cosa se complica. La moción de censura contra Mariano Rajoy, la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa yla ausencia de Presupuestos para 2019 dejan la equiparación pactada en el aire. El nuevo ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, da un paso al frente para decir que se cumplirá lo pactado y que los agentes cobrarán la “subida” en abril (justo antes de las elecciones generales) aunque no haya Presupuestos. Y aquí comienza la cadena de irregularidades e incumplimientos.

“Irregularidades” en el proceso de equiparación

Lo primero que llama la atención en esta segunda fase es lasalida de tono del director general de la Guardia Civil, Félix Azón. En contra de la opinión de la mayoría de asociaciones que forman parte de “Unidad de Acción”, Azón de forma arbitraria y unilateral decidió modificar el porcentaje de reparto y rebajar un 1,72% la cantidad acordada para sus agentes. De este modo, recibirán 143,2 millones (4,3 millones menos). “Defraudados” y “engañados” exigieron la dimisión de su director general, pero aún les quedaban cosas por ver.

El 26 de febrero era el día clave, por fin la Secretaría de Estado de Seguridad daría a conocer el estudio que la consultora Ernst & Young había elaborado para verificar si los 807 millones eran suficientes para cumplir con la equiparación o era necesario una inversión mayor. Sobra decir que salieron de esa reunión como llegaron, sin dato alguno. Por reste motivo, desde los sindicatos de la Policía han llegado incluso a solicitar el informe a través del Portal de Transparencia.

En un principio Interior alegó que no se daba a conocer porque la consultora aún no les había pasado el informe cuando, según rezaba en los plazos, eso era falso. Después argumentaron que quedaban algunos datos por “pulir” y finalmente se escudaron en que tuvieron que devolver el estudio a la consultora porque no lo habían calculado “puesto a puesto”. Una respuesta, esta última, que generó aún mayor desconfianza en las Fuerzas de Seguridad, ya que la primera cláusula del acuerdo de equiparación deja muy claro cómo debía realizarse dicho estudio.


Un sinfín de explicaciones sin sentido que no convencieron a los allí presentes y que terminó con una larga lista de acusaciones, reproches por la toma de decisiones “unilaterales” y “arbitrarias” y la seria advertencia de denunciar en los tribunales las “irregularidades” de todo este proceso. Más si cabe ahora que Interior ha dado un nuevo plazo de 45 días a la consultora para que redacte un nuevo informe, cuyos resultados se conocerán después de las elecciones.

La lucha "al margen"de Jusapol

Mientras, Jusapol siempre ha mantenido que esos 807 millones eran insuficientes y ha llevado una lucha paralela utilizando otros cauces. El 17 de octubre de 2017 la Mesa del Congreso admitía a trámite la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para la efectiva igualdad y equiparación salarialde las Policías del Estado español”. El 21 de marzo de 2018, Jusapol entregaba el medio millón de firmas necesario para que llegue al Pleno del Congreso. Un trámite que sigue su curso pese al parón por elecciones y que, en principio, cuenta con el respaldo de la mayoría de fuerzas políticas.


A la espera de que se hagan públicos o no los datos del estudio de la consultora y de que esa “subida” pactada se haga efectiva en las nóminas de abril de los policías y guardias civiles, las diferencias con otras policías autonómicas siguen siendo abismales y por ese motivo Jusapol ha querido incidir en estas diferencias y ha decidido volver a las calles.