El ministro de Defensa de España, Pedro Morenés, ha llegado a Bagdad para visitar a las tropas españolas desplegadas en Irak, encuadradas en la coalición internacional contra el terrorismo yihadista y el Dáesh.

El ministro de Defensa de España, Pedro Morenés, ha llegado hoy a Bagdad para visitar a las tropas españolas desplegadas en Irak, encuadradas en la coalición internacional contra el terrorismo yihadista y el Dáesh (acrónimo en árabe del Estado Islámico).

Con su visita a Irak, que se ha mantenido en secreto por motivos de seguridad y que se produce cuatro días después del ataque en la embajada en Kabul en el que fallecieron dos policías españoles, Morenés quiere reforzar el compromiso de España en la lucha contra el terrorismo yihadista y animar a los militares a seguir trabajando por la paz y la seguridad mundiales.

Morenés ha llegado al aeropuerto de Bagdad a bordo de un avión Hércules del Ejército del Aire, procedente de Kuwait, que ha aterrizado pasadas las 18.00 hora local (15.00 GMT).

El ministro, que visitó por primera vez a las tropas el pasado 6 de marzo, viaja acompañado del jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), almirante general Fernando García Sánchez, y el comandante del Mando de Operaciones, almirante Teodoro López Calderón.

Tras llegar a Bagdad, Morenés se desplazará en helicóptero a la base de Besmayah, a unos 45 kilómetros de la capital, donde se encuentran desplegados 222 militares españoles, el grueso de la misión en Irak, que está integrada por unos 300 efectivos.

La visita del ministro a esta base, que durará cerca de una hora, se realiza de noche local por motivos de seguridad y rodeada de fuertes medidas de protección.

En la base "Gran Capitán"de Besmayah, los militares españoles se encargan de adiestrar al Ejército iraquí como parte de la coalición internacional de lucha contra el Dáesh, integrada por 60 países y liderada por Estados Unidos.

Actualmente se encuentran en esta base efectivos de la Brigada Paracaidista, que concluye estos días su despliegue de seis meses, tras relevar a la Legión el pasado verano.

Además, en Bagdad trabajan otros 30 militares.

Esta misión fue aprobada por el Gobierno y autorizada por el Parlamento en octubre del pasado año.

El 22 de enero llegaron a Bagdad los primeros 30 efectivos del Mando de Operaciones Especiales y el 22 de febrero se completó el despliegue con el izado de la bandera de España en Besmayah.

El objetivo de la coalición internacional es la formación y adiestramiento de 12 unidades tipo brigada para que se sumen a las unidades actualmente desplegadas en las operaciones contra el autodenominado Estado Islámico (EI).

Según datos de la Coalición, hasta el momento han sido instruidos unos 15.000 iraquíes y actualmente se están formando otros 3.000.

Efe