Patrimonio

Medalla de Oro para la entidad que defendió en Tenerife la obra del escultor del Valle de los Caídos

La Real Academia Canaria de Bellas Artes de San Miguel Arcángel acaba de cumplir 175 años

El conjunto escultórico de Juan de Ávalos en Santa Cruz de Tenerife
El conjunto escultórico de Juan de Ávalos en Santa Cruz de TenerifeLa Razón

Los grupos PP y Coalición Canaria (CC) del Cabildo Insular de Tenerife han propuesto la incoación del expediente para otorgar la Medalla de Oro a la Real Academia Canaria de Bellas Artes de San Miguel Arcángel (RACBA), en atención a "sus aportaciones a la comunidad”.

La petición llevada a Pleno se aprobó con los votos de CC, PP y Vox, por lo que se encuentra en el plazo de los trámites pertinentes y, en tres meses, el documento estará listo.

Informes de la RACBA han sido aportados a favor de la obra de Juan de Ávalos en Santa Cruz de Tenerife, como cuando se solicitó protección para la escultura conocida como el Ángel de la Paz. La obra había sido incluida en el catálogo de vestigios franquistas tinerfeño, aunque el Gobierno insular acaba de anularlo. Y el Cabildo de Tenerife ha iniciado los trámites para su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de monumento.

La Real Academia Canaria de Bellas Artes San Miguel Arcángel y la Asociación para la Investigación y Protección del Patrimonio San Miguel Arcángel ya pidieron en 2019 que se tramitase un expediente como BIC, lo que encontró el rechazó del anterior del Cabildo de Tenerife, que ostentaban en coalición PSOE y Ciudadanos, con el apoyo de Podemos.

Un informe de 2018 de la RACBA refiere que “poseer una obra de la categoría artística de la de Juan de Ávalos, académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid (1974) y de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes (1880) y Gran Cruz de la Orden de Isabel La Católica, honra sin duda el patrimonio artístico de Santa Cruz de Tenerife”.

La entidad se creó por Real Decreto de la Reina Isabel II de 31 de octubre de 1849 en Santa Cruz de Tenerife con el nombre de “Academia Provincial de Bellas Artes” y estableció su sede el Santa Cruz De Tenerife, al ser Canarias una provincia única y al existir en la ciudad el precedente de la Sociedad de Bellas Artes creada en 1846.

Su existencia ligada a la enseñanza y difusión de las artes fue una constante a pesar de los avatares políticos, económicos y administrativos de las instituciones del Estado en el último tercio del siglo XIX, hasta que en 1913 fue restablecida por Real Decreto del Rey Alfonso XIII de 18 de julio de 1913, a propuesta del ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes Joaquín Ruiz Jiménez.

Siguió desarrollando su labor durante el siglo XX con la denominación de Real Academia de Bellas Artes de San Miguel Arcángel.

La RACBA es, con 175 años cumplidos en 2024, la segunda corporación de Derecho Público más antigua de Canarias tras el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, de quien ha recibido la Medalla de Oro de la Ciudad de Santa Cruz de Tenerife.

La importancia de la tarea realizada por la Real Academia Bellas Artes llevó al Parlamento de Canarias a crear la Ley 5/2012, de 25 de octubre en la que se las dota de un marco jurídico constitucional que les permitirse seguir impulsando las artes y las ciencias.

La RACBA, Corporación de Derecho Público, estaba asociada al Instituto de España en el que se integraban todas las Academias españolas, y dependía del

Ministerio de Educación, que tramitaba ante el Consejo de Ministros del Estado sus estatutos y modificaciones, los cuales serían sancionados por real decreto. Esta tutela y facultad de tramitación le fue otorgada al Gobierno autónomo de Canarias cuando se le transfirieron las competencias en materia de Educación. Con la aprobación de la ley 5/2012 de 25 de octubre por el Parlamento de Canarias, la Ley de Academias Canarias, se amparó legalmente a estas academias dentro del organigrama del Gobierno autónomo, dependiendo de la Consejería de la Presidencia.

Sumado a su carácter docente e investigador, en cuestiones de Arte y Patrimonio, la RACBA se constituye como un órgano consultivo oficial no solo ante el Estado Español, sino especialmente frente a las instituciones político administrativas canarias: Gobierno autónomo (Decreto 662/1984 de 11 de octubre), Cabildos Insulares y Municipios, siendo sus dictámenes oficiales vinculantes, recogiéndose su función en la Ley 11/2019, de 25 de abril, de Patrimonio Cultural de Canarias.

Sus fines competenciales figuran detallados en sus estatutos. Además, las Reales Academias pueden por amparo legal impartir cursos de doctorado a través de sus Académicos doctores, pudiendo estos también, aunque no estén vinculados profesionalmente a ninguna Universidad, y a demanda de alguna de éstas, formar parte de tribunales para expedir títulos de Doctor.

En sus ya camino de 176 años de labor en Canarias, pues su ámbito de actuación abarca desde sus inicios a todas las Islas de la autonomía, la RACBA está indeleblemente unida a personalidades del mundo de las artes plásticas, la música, la arquitectura como Sabino Berthelot, Nicolás Alfaro, Gumersindo Robayna, Manuel Oráa, Patricio Estévanes, Teodomiro Robayna, Pedro Tarquis, Eduardo Tarquis, Pedro González, Antonio Vizcaya Carpenter, Eliseo Izquierdo, Dolores Trujillo, Bonín Guerín, Borges Salas, Felo Monzón, Lothar Siemens, Domingo Pérez Minik, María Belén Morales, Gonzalo González, Carlos Millán Hernández-Egea, Maribel Nazco, Ana Quesada, Rosario Álvarez, entre muchos más miembros que avalan la importancia del capital humano, y humanista de este más que centenario proyecto independiente en beneficio del patrimonio y de la cultura de toda la sociedad canaria que es la Real Academia, según informan los promotores de su reconocimiento.