Los jefes de Estado y Gobierno de la Unión Europea (UE) iniciaron hoy una cumbre de dos días en la que analizarán la escalada de tensión en Crimea y decidirán si toman más medidas contra Rusia, a la vez que debatirán sus políticas energéticas, con especial hincapié en la dependencia energética.

Durante estos dos días, los Veintiocho decidirán qué respuesta conjunta dan a la anexión por Rusia de la región autónoma ucraniana de Crimea, que podría pasar por la adopción de nuevas sanciones individuales o la cancelación de la cumbre bilateral con Moscú de junio, sin que en un principio se esperen represalias económicas.

A su llegada a la reunión, el presidente de Francia, François Hollande, anunció la suspensión de la cumbre UE-Rusia prevista para junio, al considerar que dadas las circunstancias actuales "no puede tener lugar".

"Se va a proceder a una suspensión de las relaciones políticas, puesto que la reunión que tenía que haber entre la UE y Rusia no se puede celebrar en estas condiciones", dijo Hollande.

Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, señaló: "Vamos a dejar muy claro que estamos preparados para aplicar sanciones económicas si hay más escalada", al tiempo que subrayó que "la anexión de Crimea viola todos los tratados internacionales".

Merkel abogó por combinar el diálogo con la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), para que pueda ir rápidamente una misión de observación a Ucrania, con una ampliación de las sanciones vinculadas a la restricción de visados y a la congelación de activos.

Asimismo, el primer ministro británico, David Cameron, consideró "inaceptable"la actitud de Moscú y reclamó que los países de la UE hablen "con una voz clara y unida".

La presidenta de Lituania, Dalia Grybauskaite, cuyo país es uno de los estados de la UE más dependientes de las importaciones de gas ruso, explicó que de momento sólo se van a aplicar sanciones de carácter diplomático, aunque a una lista de individuos más amplia de lo previsto en un primer momento.

"Si todavía se mantiene la amenaza hay que hablar del embargo de armas de manera inmediata", recalcó, y aclaró que eso formaría parte de una tercera fase de sanciones que también incluiría penalizaciones económicas.

Los líderes tienen previsto abordar hoy en primer lugar asuntos como el suministro energético, los planes para relanzar la política industrial, el "semestre europeo"-el calendario para coordinar las políticas económicas y presupuestarias-, el cambio climático o las relaciones con África.

La crisis política ucraniana y las relaciones con Rusia, que hasta el momento ha ignorado las advertencias de Bruselas y los socios comunitarios, será tratada en la cena de los Veintiocho, prevista a partir de las 19.15 GMT.

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha llegado esta tarde a la sede del Consejo Europeo para participar en la cumbre de la UE

Rajoy ha llegado a las 16:30 horas (15:30 GMT) al edificio Justius Lipsius de la capital belga, al que se ha desplazado caminando desde el hotel en el que se aloja en Bruselas.

El jefe del Ejecutivo prevé pedir en la reunión un compromiso al resto de líderes de la UE con el impulso de las interconexiones energéticas y, en particular, las gasísticas.

Así se lo comunicó al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en la carta que le remitió el pasado 11 de marzo y en la que subrayaba que el Midcat (la interconexión de los sistemas de gas de España y Francia) debe convertirse en "un verdadero objetivo vinculante de la política energética".

Respecto a la posición que debe adoptar la UE ante la actitud de Rusia con Ucrania, Rajoy, según fuentes del Gobierno español, no se opondrá a posibles sanciones, pero pedirá tener "la cabeza fría"y actuar con cautela y prudencia.

Sí reiterará la "inequívoca"posición española respecto a la defensa de la integridad territorial de Ucrania y, en consecuencia, su rechazo al referéndum en Crimea que considera ilegal.

Aunque en la agenda de la cumbre no se incluye el tema de la inmigración, ésta será una cuestión que el presidente del Gobierno español abordará previsiblemente en sus conversaciones con otros líderes comunitarios e, incluso, en las sesiones del Consejo Europeo.

Lo que sí tiene que decidirse entre hoy y mañana en Bruselas es la agenda de la cumbre UE-África que se celebrará en la capital belga los días 2 y 3 de abril.

En principio, estaba previsto que las cuestiones sobre la seguridad en los países africanos coparan esa cumbre, pero Rajoy y otros líderes europeos van a plantear que se debata también sobre la cooperación al desarrollo y sobre los flujos migratorios.

Este es un análisis de especial importancia para España en un momento en el que los ciudades de Ceuta y Melilla están sufriendo en las últimas semanas un repunte de la presión migratoria.