Alerta de los guardias civiles en Murcia: sin medios ante el temor a un incremento de las narcolanchas

Tras el trágico asesinato de dos guardias civiles tratando de dar freno a una narcolancha en Barbate (Cádiz), se prevé que la presión policial aumente en el Campo de Gibraltar y eso puede tener como consecuencia un mayor riesgo para la Región de Murcia. ¿Por qué? Porque hay temor a que se desplacen a esa zona los delincuentes que actúan en el sur de España. De hecho, los murcianos ya experimentaron un aumento de las llegadas de narcolanchas a sus costas durante los cuatro años en el que estuvo en activo la unidad OCON Sur, creada entre 2018 y 2022 para actuar específicamente contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar. Y, ahora se puede reproducir ese escenario, por lo que han saltado las alarmas en la zona porque los guardias civiles también sufren falta de medios, igual que en el Estrecho, para actuar contra los delincuentes.

De ese temor en Murcia, que va "in crescendo", se ha hecho eco el PP, y la diputada murciana Míriam Guardiola ha formulado varias preguntas al Gobierno para conocer cuáles son sus planes en la zona. La diputada popular quiere saber si el Ministerio del Interior tiene intención de incrementar el número de efectivos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, si tiene previsto dotar de mayores medios materiales para luchar contra las narcolanchas y si tiene la previsión de crear una unidad especial en la zona (al estilo de OCON Sur en el Campo de Gibraltar).

Lo cierto es que el temor tiene fundamento dado que el Servicio Marítimo de la Guardia Civil, que se encarga de dar caza a las narcolanchas, necesita más recursos humanos. Como mínimo, la mitad para alcanzar los 60 que corresponderían en la zona. Además, tampoco tiene recursos materiales suficientes para poder frenar a las narcolanchas porque solo dispone de tres embarcaciones y tan solo una de ellas tiene capacidad de motor para ponerse a la altura de las narcolanchas. Las otras dos, son del todo insuficientes.

De momento, sí es cierto que la situación de Murcia no es comparable con la del Campo de Gibraltar, pero precisamente las quejas de las asociaciones de la Guardia Civil son preventivas. Son conscientes de que cuando ha habido una mayor presión policial en el sur de España, los narcotraficantes han desplazado sus movimientos hacia la zona de Murcia y Almería y eso puede volver a ocurrir en los próximos meses. Para tratar de evitar un nuevo episodio como el de Barbate, con guardias civiles superados por las capacidades de las narcolanchas, el PP y los agentes de la Guardia Civil en Murcia piden más medios.

AUGC recuerda cómo, en la década de los años 80 y 90, Murcia era el destino de narcolanchas que llegaban principalmente desde Marruecos. Sin embargo, esta presión fue descendiendo con la instalación de los radares del SIVE en toda la costa. -El Sistema Integrado de Vigilancia Exterior, un sensor radar que detecta las embarcaciones a 10 kilómetros de distancia y transmite la señal a varios monitores-. Desde AUGC aseguran que, aunque ahora la presión en la Región de Murcia está en los parámetros "normales", hubo un aumento de la actividad de las narcolanchas coincidiendo en el tiempo en el que se mantenía activo el grupo de élite que operaba en el Estrecho. Lo mismo ocurrió con las viviendas que servían para guardar este tipo de embarcaciones como ocurrió en las costas de Mazarrón o Águilas.

Asimismo, advierten de que "siempre" hay presión del narcotráfico y no se puede descuidar la vigilancia siendo insuficiente la plantilla y las embarcaciones del Servicio Marítimo que, a su vez, tienen que luchar contra oleadas de pateras, realizar numerosas inspecciones de pesca y, en verano principalmente, ocuparse de la vigilancia del Mar Menor.