Congreso

Sánchez convalida de rebote la reforma laboral por un solo voto de diferencia

El error de un diputado del PP que apoyó la norma enturbia la aprobación de la ley estrella. PP y Vox anuncian recursos

Esperpento en el Congreso de los Diputados. La reforma laboral que en Moncloa vendían como un «éxito», un acuerdo inédito con patronal y sindicatos, que mandaba un mensaje de estabilidad a Bruselas acabó ayer convalidada de rebote, salvada por un solo voto emitido por un error. Si el Gobierno había ubicado el nuevo marco laboral como la ley más importante de esta legislatura y pensaban que les reforzaría, lo que se vio en el Parlamento fue justo lo contrario. La imagen de una debilidad extrema.

El diputado del PP que confundió su voto ha salvado más que la reforma laboral, la legislatura y una crisis entre la coalición y sus socios tradicionales, que se pusieron de perfil. La consecuencia directa es que esto ata a Sánchez todavía más a la mayoría Frankenstein. Si parecía que se resquebrajaba la entente, en Moncloa son hoy plenamente conscientes de que jugar a la geometría variable tiene demasiados riesgos. Había reservas con UPN. Vértigo por no ser un socio habitual ni fiable. Y las suspicacias se confirmaron.

Una votación de infarto, en la que la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, llegó a dar por tumbado el decreto por un error de cálculo, despertando el aplauso en las bancadas de Vox y del PP, que conocía el movimiento que harían los dos diputados de UPN, Sergio Sayas y Carlos García Adanero, pasando al «sí» comprometido por su dirección al «no» de un voto en conciencia que fueron deslizando durante toda la jornada, a pesar de confirmar que acatarían la disciplina. Esto habría dado un vuelco a la votación, permitiendo aventajar al bloque del «no» a la reforma laboral por un solo voto, pero finalmente el error del diputado del PP, Alberto Casero, decantó la balanza del lado del Gobierno. La votación salió adelante con 175 a favor y 174 en contra.

Según informó tras la votación la portavoz del PP, Cuca Gamarra, el diputado extremeño había pedido el voto telemático. Según señaló a los medios, votó a favor por un problema técnico y acudió de inmediato al Pleno para intentar votar presencialmente, pero ya no le dejaron. Fuentes del PP aseguran que Casero votó «no», pero se percató de que en el certificado que aparecía en pantalla constaba que el sentido de voto que se había recogido era un «sí». Según las citadas fuentes, «de forma inmediata» se han puesto en contacto con la Mesa del Congreso sin obtener respuesta, por lo que se ha intentado establecer este contacto a través de la dirección del Grupo Popular para avisar de lo sucedido. «Antes de la votación, la portavoz, la vicepresidenta del Congreso, Ana Pastor, y su grupo lo ha puesto en conocimiento de la Mesa y han ignorado la reclamación», aseguran desde el PP.

Las fuentes populares se apoyan en un incumplimiento del reglamento, ya que, «tal y como recoge en la resolución de la Mesa del Congreso del 21 de mayo de 2012 para el desarrollo del procedimiento de votación telemática, en el apartado 4. Junto a esto, según el artículo 82 punto 2 del Reglamento del Congreso, el voto emitido «deberá ser verificado personalmente».

Convocatoria de la Mesa

Una comprobación que, aseguran desde el PP, la presidenta del Congreso eludió. «La presidenta de la Cámara Baja ha ignorado la petición que se le ha hecho a la Mesa, de ahí su supuesta incongruencia al anunciar que no salía adelante la reforma, para después negar el uso de la palabra a la portavoz del Grupo Popular anunciando que sí salía».

En el PP muestran su malestar y aseguran que «se han vulnerado los derechos fundamentales del diputado popular que claramente ha indicado que ha votado no a la reforma laboral». Fuentes populares aseguran que «llegarán hasta el final en las reclamaciones pertinentes para que se haga justicia». Letrados del Congreso indicaron que para resolver dicho error habría que proceder a la anulación de la votación y repetirse de nuevo. De momento, el PP ha presentado un escrito a Batet para que convoque urgentemente a la Mesa del Congreso

El líder del PP, Pablo Casado, anunció que su partido recurrirá a la Mesa del Congreso y al Tribunal Constitucional el «fraude democrático». Según recalcó, es un «atropello a las instituciones». El líder de Vox, Santiago Abascal, tildó lo ocurrido de «pucherazo» y no descarta recurrir también al Constitucional.

¿Quién es el diputado qué habría «salvado» a Sánchez por error? Alberto Casero estudió en el Colegio Sagrado Corazón de Jesús de Trujillo y es licenciado en Derecho por la Universidad de Extremadura. Comenzó su carrera política en las Nuevas Generaciones del PP, afiliándose cuando cumplió la mayoría de edad. En 2001 fue elegido como presidente de la provincia y miembro del Comité Ejecutivo Nacional de Nuevas Generaciones. En 2003, se convirtió en el diputado más joven de la Asamblea de Extremadura, donde ejerció como Portavoz del Grupo Popular en Economía, así como portavoz de Jóvenes y Deporte, hasta 2011.

En 2007 fue elegido Secretario General del Partido Popular de Cáceres, algo que compatibilizaba con ser el presidente del partido a nivel local, cargo que ejercía desde 2005. A partir de 2011 ejerció como senador por Cáceres, hasta 2015. Entre 2011 y 2019, fue alcalde de su localidad natal, Trujillo. Fue en 2019 cuando se convirtió por primera vez en diputado del Congreso, cargo que ostenta junto con el de Secretario Ejecutivo Nacional de Organización del PP.