El juez concluye el caso Dina, pero escuchará a Bousselham

El juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, ha decidido no alargar más la investigación del “caso Dina” después de que la Policía no haya concluido quién destruyó la tarjeta de la ex asesora de Pablo Iglesias. Esto no afecta a las diligencias que ya están acordadas. El magistrado escuchará a la propietaria del móvil robado, Dina Bousselham, a su ex pareja y al exDirector Adjunto Operativo, Eugenio Pino, como le encomendó la Sala de lo Penal del órgano. Pero, una vez terminadas estas citaciones, el magistrado no cree que haya mucho más que hacer para saber en qué circunstancias se destrozó la microSD de Bousselham.

Por eso, en un auto de este jueves y al que ha tenido acceso LA RAZÓN, García Castellón dice que “se ha de dar la instrucción finiquitada” y no prorroga esta pieza de la macrocausa “Tándem” que caducaba este 29 de enero.

La Policía Científica entregó esta semana un informe que era clave para el devenir de las pesquisas y las conclusiones fueron decepcionantes para los investigadores. Los agentes contestaron con negativas a todas las peticiones del juez porque fueron incapaces -incluso con la ayuda de los técnicos de Samsung- de acceder al contenido de la tarjeta robada para detectar quién había entrado por última vez, quién la había destruido y cómo se había roto.

Sin ninguna de estas incógnitas resueltas, el juez no descartó de plano citar a Iglesias para escuchar su versión, puesto que García Castellón tiene el convencimiento de que Iglesias tuvo que ver con el destrozo del dispositivo. Así lo demostró cuando trató de imputarle un delito de revelación de secretos y otro de daños informáticos elevando una exposición razonada al Tribunal Supremo. Pero tras analizar bien el informe policial, el magistrado entiende que las indagaciones no tienen más recorrido.

La Policía aclara que no había sido posible la recuperación de los datos “ni siquiera de forma parcial” . Los delitos que el juez pretendía imputarle a Iglesias no se sustentan con los actuales indicios: el de daños informáticos no se puede acreditar (en tanto que los agentes no han obtenido datos concluyentes) y el de revelación de secretos necesita de la denuncia de la afectada.

García Castellón escuchará a Bousselham, pero lo previsible es que ella perdone a su exjefe, pues así lo ha hecho en todas sus versiones anteriores. Sin la acusación de la exasesora no hay delitos por los que acusar al exvicepresidente.

El instructor detalla que solo la Fiscalía ha mostrado su oposición a alargar la pieza, mientras que las restantes partes o no se han apuesto o han solicitado su ampliación. Fuentes de Podemos reprochan al magistrado que haya “dado la vuelta” a las pesquisas (en las que Iglesias empezó siendo perjudicado) y no haya investigado a fondo por qué los datos de la tarjeta robada aparecieron en la casa del comisario jubilado José Manuel Villarejo.