Una industria descarbonizada es un eje fundamental para alcanzar el objetivo de país de neutralidad de emisiones en 2050. Considerando que la industria en España representa el 25% de las emisiones directas, todas las tecnologías disponibles, maduras y viables económicamente y con cero emisiones deben ser tenidas en cuenta por el sector.

Así se desprende del estudio «Un sistema gasista Net-Zero: una pieza clave en un modelo energético descarbonizado a 2050», elaborado por Deloitte junto a la Fundación Naturgy. El estudio ha sido presentado en una jornada en la que estuvieron presentes asociaciones industriales y las empresas, que defendieron su alto nivel de compromiso con ese objetivo. Para el que, por otra parte, consideran necesario un apoyo regulatorio en el que respaldar sus inversiones. Las previsiones que contempla el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) son que la transición energética requerirá inversiones de 300.000 millones de euros hasta 2030, de las cuales el 80% concernirán al sector privado.

El biometano, gas clave

El papel que pueden llegar a tener los gases renovables, y el biometano es uno de los más destacados, puede ser esencial como alternativa para reducir de manera rápida y eficiente las emisiones del sector.

Este gas, que reúne condiciones similares al gas natural y que se puede distribuir a través de la red de gas sin nuevas y ni grandes inversiones, tiene a su favor que se obtiene a partir del tratamiento de varios tipos de residuos, por lo que fomenta la economía circular. Además, genera empleo de calidad, revitaliza las zonas rurales y es clave para evitar su despoblación.

Naturgy quiere ser líder en el impulso de los gases renovables en España, tanto en la producción y distribución de biometano, como en el desarrollo hidrógeno verde a medio plazo, ya que ambos constituyen un vector energético que, previsiblemente, tendrá un alto impacto en el futuro mix energético.

En este sentido, la compañía no solo gestiona una amplia cartera de proyectos que la sitúan en una posición óptima para aprovechar la oportunidad que ofrecen los gases renovales en el camino de la descarbonización, sino que también está dispuesta a desplegar, como hace ya, importantes inversiones y recursos en este área de negocio.

Entre los proyectos ya en marcha, Naturgy cuenta con tres plantas de producción propia ya en operación: en Edar de Bens (A Coruña), Cerdanyola del Vallès (Barcelona) y Vila-Sana (Lleida). A estas se sumarán en unos meses las de Utiel (Valencia) y Utrera (Sevilla).

Además, para facilitar la descarbonización eficiente de la actividad industrial, Naturgy y la papelera Grupo Lecta, uno de los líderes de la producción de papel, han firmado recientemente un acuerdo de suministro de gas renovable, que contará con la garantía de origen y pruebas de sostenibilidad certificadas. Con él funcionarán los centros de producción de la papelera Lecta en Leitza (Navarra) y Zaragoza. Este es el segundo gran acuerdo industrial de venta de este gas renovable por parte de Naturgy, tras el firmado con Inditex este año, que permitirá al grupo textil cubrir el 75% del consumo de gas natural en sus instalaciones de Arteixo y Laracha.