Argentina

Las tres reglas de Milei para sanear Argentina

Esta es una receta fiscal dirigida a garantizar la solvencia del Estado argentino

Javier Milei, presidente de Argentina, durante la Convención política de Vox "Europa Viva 24".
Javier Milei, presidente de ArgentinaAlberto R. RoldánLa Razón

Este domingo Javier Milei defendió ante el Congreso de Argentina su proyecto de presupuestos para el año 2025. Y durante su discurso esbozó los tres grandes principios con los que pretende regir la política fiscal del país durante los próximos años. Se trata de tres reglas sencillas pero de enorme importancia para sanear la situación financiera de Argentina.

Primero, el equilibrio presupuestario es irrenunciable y, por ello, hay que abandonar la lógica de decidir primero cuánto gastar y luego ver cómo financiarlo (impuestos, deuda o inflación) para pasar a la lógica de determinar primero con cuántos recursos fiscales es previsible que cuente el Estado para luego, en función de ellos, establecer cuánto se puede gastar.

Segundo, si conforme va avanzando el año se comprueba que la recaudación fiscal se queda por debajo de lo previsto y, por tanto, que el equilibrio presupuestario no está garantizado, el gobierno procederá a recortar el gasto público hasta restablecer el equilibrio.

Y tercero, si por el contrario la recaudación fiscal fuera superior a la prevista durante la elaboración del presupuesto, entonces cabrán dos posibilidades: si se trata de un aumento transitorio de la recaudación, se utilizará para amortizar deuda o para reducir la oferta monetaria; si se trata de un incremento estructural de los ingresos públicos, se bajarán impuestos (siempre respetando el equilibrio presupuestario) para devolverles esos recursos a los ciudadanos.

Estamos, en suma, ante una receta fiscal dirigida a garantizar la solvencia del Estado argentino al mismo tiempo que se va abriendo espacio fiscal para reducir la presión tributaria que recae sobre los ciudadanos: se trata, además, de un rumbo totalmente distinto al que ha seguido Argentina durante las últimas décadas y que tanto ha empobrecido a esa sociedad.

La clave para lograr todos estos objetivos está, cómo no, en la progresiva reducción del tamaño del Estado. Ojalá Javier Milei cumpla con su palabra y pueda restaurar la libertad y la prosperidad de la Argentina.