Medidas económicas
España entierra el déficit excesivo
Casi un decenio después, las cuentas públicas vuelven al redil que marca Bruselas sin arreglos de última hora.
Casi un decenio después, las cuentas públicas vuelven al redil que marca Bruselas sin arreglos de última hora.
España ha logrado cumplir con los objetivos de déficit público pactados con los socios del euro. Y, por primera vez desde el comienzo de la crisis, lo hace sin necesidad de apaños de última hora que impliquen que Bruselas abra la mano. Según anunció ayer el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al más puro estilo Trump –vía Twitter–, España cerró 2017 con un déficit del 3,07% del PIB, algo por debajo del 3,1% acordado con Bruselas, con lo que España se acerca a su objetivo de abandonar la «tutela» comunitaria por déficit excesivo.
Emulando el estilo personalista de su homólogo estadounidense, Rajoy se adelantó a su ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, al indicar en la red social que «España cumple» y que se trata de un «dato fundamental para seguir creciendo, creando empleo y garantizando» los servicios públicos. Es la primera vez desde 2007 que las cuentas del Estado se ciñen a los criterios de cumplimiento de déficit que estableció el Tratado de Maastrich para todos los socios del eurosistema, que establece un déficit del 3% salvo excepcionalidades «temporales», como fue la brutal crisis.
Las cuentas se han desviado en unos 35.724 millones de euros el pasado ejercicio cuando en 2012 el agujero público era de más de 100.000 millones, replicando practicamente el del los tres años precedentes. España encadenó entonces varios ejercicios con desajustes por encima del 9% del PIB (2010 y 2011) e incluso sobrepasando el 10% (2009 y 2012).
El objetivo pactado con Bruselas de cerrar el déficit público en el 3,1% en 2017 se desglosaba entre el déficit del 1,1% para el Estado, el 1,5% de la Seguridad Social y el 0,6% de las regiones. El desglose por administraciones públicas (Estado, comunidades autónomas y ayuntamientos), lo dará a conocer Hacienda previsiblemente el próximo lunes 26, justo un día antes de que se aprueben los Presupuestos Generales del Estado para 2018 en un Consejo de Ministros extraordinario.
En su anuncio, Rajoy recordó que la economía cerró 2016 con un déficit del 4,3%, por lo que el cierre de 2017 (3,07%) supone un recorte de más de 12.000 millones, 1,2 puntos de PIB. Este año, el objetivo pactado con Bruselas es el 2,2%. España logró cumplir con el déficit el pasado año pero fue gracias al punto adicional que Bruselas ofreció para el desajuste, ya que el objetivo inicialmente pactado era del 3,6%. En 2016, el agujero de las cuentas públicas fue del 4,3% sin que se contabilizaran las ayudas a la banca –con ellas el déficit fue del 4,6%–.
El Gobierno se encuentra más cerca de abandonar la humillante lista de países cuyo déficit vigila Bruselas. Una lista en la que sólo figura España. El hecho de que las cuentas del Estado estén a siete centésimas de cumplir el 3% de desvío hace prever que España salga del procedimiento de déficit excesivo el año que viene.
Por otra parte, los jefes de Estado y de Gobierno de la UE confirmaron ayer formalmente el nombramiento del exministro de Economía español Luis de Guindos como nuevo vicepresidente del Banco Central Europeo, tras su elección por el Eurogrupo el pasado 19 de febrero.