Nombramiento confirmado: José Luis Escrivá será el nuevo gobernador del Banco de España. No hubo sorpresas y el todavía ministro de Transformación Digital y Función Pública asumirá el máximo cargo del supervisor bancario durante los próximos seis años. Así lo anunció el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, que compareció en el Congreso de los Diputados para defender la idoneidad del ministro de Transformación Digital y Función Pública para asumir durante los próximos seis años el puesto de gobernador de la máxima institución bancaria en lugar de Pablo Hernández de Cos.

El Gobierno de Pedro Sánchez rompe así con la tradición no escrita que establece que el Gobierno elige al gobernador y el principal partido de la oposición decide el nombre del subgobernador, pero con el consenso de ambas partes. Las negociaciones celebradas entre ambos partidos desde antes de verano para tratar de pactar los nombres al final quedaron en la imposición por parte del presidente del Gobierno de Escrivá, lo que provocó la ruptura de la mesa y el rechazo del PP por considerarlo un "nombramiento político".

Cuerpo recordó en su comparecencia que la Ley de Autonomía del Banco de España establece en su artículo 24.1 que el gobernador será nombrado por el Rey a propuesta del presidente del Gobierno, entre quienes sean españoles y tengan reconocida competencia en asuntos monetarios o bancarios, "requisitos que cumple de largo Escrivá", explicaron a LA RAZÓN fuentes gubernamentales. Cuerpo, aunque defendió al que será nuevo gobernador como el "candidato idóneo" gracias a su "cualificación técnica, reconocida, acreditada" y a su" experiencia y conocimiento de las instituciones europeas", advirtió que el nuevo gobernador "deberá afrontar los nuevos retos que vienen, que no serán nada fáciles".

El ministro de Economía también destacó que además de su "amplia experiencia" en España, Escrivá cuenta con un paso "acreditado" por las más importantes instituciones financieras y en numerosos organismos públicos y privados, poniendo en valor que posee su "profundo conocimiento" del propio Banco de España, que "es la institución a la que pertenece como trabajador público y en la que ha desempeñado buena parte de su carrera".

Escrivá es funcionario en excedencia del Banco de España. Fue subdirector del Departamento de Estudios Monetarios y Financieros y jefe de la Unidad de Investigación Monetaria, antes de ser asesor del Instituto Monetario Europeo y pasar a continuación al Banco Central Europeo (BCE) para ser jefe de la División de Política Monetaria entre 1999 y 2004. También ejerció de economista-jefe y director del servicio de Estudios de BBVA entre 2004 y 2010. Entre 2014 y 2020 ocupó la presidencia de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal nombrado por el PP recién creado este organismo y en 2020 entró en el Gobierno de Pedro Sánchez, primero como ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones (2020-2023) y actualmente como ministro de Transformación Digital y Función Pública.

Cuerpo ha defendido que la legalidad vigente ampara la designación de Escrivá porque, "si vamos a la propia normativa de autonomía del Banco de España, lo que dice es que exige de manera explícita que el candidato a gobernador tenga reconocida competencia en asuntos monetarios o bancarios", y ha explicado que Escrivá cumple con todo ello.

No lo ve así el PP, que mantiene su rechazo al nombramiento y califica como "inaudito" que Escrivá vaya a fiscalizar como gobernadorsu propia gestión como ministro: "Es una auténtica perversión". Así se ha manifestado el portavoz popular, Borja Sémper, que ha insistido en que los organismos que tienen que velar "por el control de lo que hace el poder" no puede caer bajo el ejercicio de "colonización" de las instituciones del Gobierno de Pedro Sánchez, después de nombrar a una ministra de Justicia como fiscal general del Estado, o a otro ministro de Justicia como miembro del Tribunal Constitucional. "El señor Escrivá va a ser gobernador del Banco de España y va a fiscalizar la gestión del propio señor Escrivá, cuando él era ministro". Sémper ha compartido que "entiende" que al Gobierno, como a todos los gobernantes, le "moleste mucho" la "independencia de los órganos independientes", pero que es "necesario que el poderoso esté controlado" y el Banco de España es "una institución fundamental para garantizar que las políticas públicas de contenido económico sean fiscalizadas por organismos independientes".

En el mismo sentido, el vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo, ha considerado que existe un "claro conflicto de intereses", puesto que Escrivá será "evaluador de sus propias políticas", entre ellas, la reforma de las pensiones. Y subrayó que, con esta designación, el Gobierno hace "un flaco favor a la independencia de las instituciones".

Desde Podemos tampoco se han mordido la lengua. Su secretario de Organización y portavoz, Pablo Fernández, ha expresado directamente que "no es democráticamente lo más higiénico ni lo más adecuado y, desde luego, nos parece que el nombramiento es un error", recordando que no es la primera vez que el PSOE pone a un ministro al frente de alguna institución del Estado, dando como ejemplo el caso de la exministra de Justicia Dolores Delgado, que fue nombrada fiscal general. Asimismo, ha criticado a los socialistas por tomar decisiones "de manera unilateral, sin consultar a sus socios de Gobierno", y les ha acusado de buscar únicamente "colocar a sus peones y dar salida a sus miembros".

Sánchez ha acelerado esta semana la incorporación de Escrivá al sillón del organismo bancario ya que el nombramiento del nuevo gobernador debía realizarse antes del 11 de septiembre, cuando finaliza el mandato de la actual subgobernadora, Margarita Delgado, quien ha asumido las máximas funciones en la institución de forma provisional, después de que en junio expirara el mandato de seis años de Pablo Hernández de Cos. De esta forma, Escrivá podrá acudir la semana que viene a Fráncfort a la próxima reunión de política monetaria del BCE que se celebra el 12 de septiembre.

Falta aún por cerrarse el último capítulo: quién sustituirá a Delgado en el puesto de subgobernadora. Su cargo expira el miércoles que viene. Entre los nombres que suenan para sustituirla se encuentra el de la actual vicepresidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Monserrat Martínez Parera. De momento, el PP ya ha confirmado que no propondrá ningún nombre para el cargo de subgobernadora al no haberse cumplido con las normas no escritas de designación de ambos cargos. El Banco de España no tenía gobernador desde que llegó a su fin el mandato de Hernández de Cos el pasado mes de junio, y en este periodo ha sido Delgado quien ha asumido temporalmente la dirección de la institución.