Los dos grandes grupos automovilísticos europeos han incrementado en el primer semestre de este año sus beneficios en mucha mayor proporción que sus ventas. Mientras Stellantis conseguía subir su beneficio neto en un 34%, el grupo Volkswagen lo hacía en un 27%. Un contraste respecto al desarrollo de sus ventas, que en Stellantis descendieron un 7,4%, con subida del 50% en coches eléctricos. En VW la bajada fue del 22%, aunque aumentaron en un 27% las entregas de coches eléctricos. La crisis de semiconductores y otros suministros penalizaron la producción de las factorías, pero esta circunstancia se compensó con ahorros en la gestión y mayores márgenes en cada vehículo vendido.

Stellantis, el grupo surgido de la unión de PSA y FCA y que agrupa a marcas como Peugeot, Fiat, Citroen, Opel, Alfa Romeo, DS, Abarth, Jeep, etc… logró un beneficio neto de 7.960 millones de euros en el primer semestre del año, un 34% más que en el mismo periodo de 2021, apoyado la rentabilidad récord a nivel global gracias a los resultados de América del Norte. La compañía registró unos ingresos de 87.999 millones de euros en el primer semestre del año (un 17% más) y alcanzó un beneficio operativo de 12.374 millones, lo que supone un aumento del 44%.

Aunque, como hemos señalado, el número de vehículos vendidos bajó un 7,4% hasta las 3,03 millones de unidades, la empresa compensó este descenso con un mejor rendimiento operativo y comercial. El margen operativo alcanzó la cifra récord del 14,1%, frente al 11,4% del primer semestre del año pasado.

Especialmente bueno fue para Stellantis el mercado de América del Norte, con un ligero aumento de ventas hasta las 959.000 unidades y un margen operativo récord del 18,1%. En Estados Unidos, el mayor mercado de esa región, la cuota de mercado del grupo aumentó medio punto hasta alcanzar el 11,7%. En contraste, en

En Europa, las ventas cayeron un 18,1% debido a la incertidumbre económica y a los problemas de suministro de semiconductores, pero los ingresos bajaron solo un 2,2% gracias al aumento de la rentabilidad por los mejores precios de venta. En Latinoamérica y Asia-Pacífico-África, las ventas se estancaron, pero las operaciones arrojaron también mayores beneficios gracias a la mayor rentabilidad.

Por su parte, el grupo Volkswagen aumentó entre enero y junio su beneficio neto un 27%, hasta 10.296 millones de euros. La cifra de negocio creció un 2% con 132.285 millones de euro y el beneficio operativo ascendió a 12.828 millones, lo que supone un crecimiento del +13%, con un margen sobre facturación del 9,7%. Dentro de este grupo, la marca española Seat tuvo en el primer semestre una pérdida operativa de 97 millones de euros, un 273% más elevada que hace un año, por el gasto extraordinario por el plan de suspensión de contratos hasta 2026 acordado en el convenio colectivo. Sin este gasto extraordinario el resultado operativo hubiera sido de 147 millones de euros, lo que mantiene la tendencia positiva del primer trimestre. El volumen de negocios disminuyó en el primer semestre hasta 5.377 millones de euros, un 4,9% menos que un año antes, pero en el segundo trimestre creció a 2.973 millones de euros, un 6% más.

Las entregas cayeron un 27,4% en el primer semestre debido a la escasez global de semiconductores, pero Cupra mantiene una tendencia muy positiva en sus ventas ya que las entregas de esta marca alcanzaron en el primer semestre las 68.400 unidades, un 79,1% más que en el primer semestre de 2021, y contribuyeron positivamente al beneficio operativo de la empresa. El modelo más vendido fue el Formentor, con más de cincuenta mil unidades.

Según fuentes de la empresa española, se encuentra en el camino correcto hacia la rentabilidad y se está centrando en la gestión de ingresos, así como en estructuras de costes y eficiencias, que construirán una estructura financiera más sólida y sostenible en el tiempo. Por otra parte, sus directivos estiman que la situación de suministro de semiconductores está mejorando gradualmente, pero seguirá siendo volátil y tensa durante la segunda mitad del año, mientras que el incremento de los precios de las materias primas y de la energía también están teniendo un impacto negativo en el resultado.