La tenista checa Petra Kvitova logró la primera victoria de su carrera ante la estadounidense Serena Williams (6-2, 6-3) en apenas una hora y 13 minutos de partido para terminar con su imbatibilidad en 2015 y regresar a la final del Mutua Madrid Open, torneo de categoría Premier Mandatory, tras ser finalista en el año 2011, en una nueva última ronda en la que se medirá a la rusa Svetlana Kuznetsova, que sorprendió también a la vigente campeona, su compatriota Maria Sharapova.

Tras cinco enfrentamientos previos entre Serena y Kvitova, las dos tenistas se medían por primera vez en tierra batida. Los espectadores madrileños se quedaron sin ver el duelo entre ambas la temporada pasada en cuartos de final por lesión de la norteamericana, y en esta ocasión tampoco pudieron ver un encuentro disputado, pues la checa no tuvo piedad de la número uno.

Williams estuvo desconectada del partido desde el inicio y se quedó sin disputar su tercera final sobre la tierra de Madrid. Tras el susto que sufrió Serena ante la bielorrusa Victoria Azarenka en octavos de final, fue finalmente Kvitova quien doblegó a la número uno sobre la pista esta temporada, con un tenis férreo y sin fisuras que estuvo apoyado en un resto implacable.

Y es que fue la jugadora de Bilovec la que comenzó golpeando en el encuentro. La checa estaba dispuesta a dar la segunda sorpresa de la jornada y entró a la pista como un ciclón para poner en aprietos a la ganadora de 19 ‘grandes’. De esta forma logró un quiebre tras un largo tercer juego en el que Serena claudicó en la quinta oportunidad de la número cuatro.

La de Michigan quiso reaccionar al cobrarse el siguiente juego al resto, pero Kvitova no se dio por vencida y logró la machada de tres roturas en un set ante una Williams que era incapaz de controlar uno de sus mejores golpes, con el que ha cimentado su reinado. La primera favorita sólo fue capaz de ganar un 28% de sus segundos saques y por ahí se escaparon gran parte de sus opciones.

El inicio de la segunda manga arrancó de la misma forma, con una nueva rotura de Kvitova que no concedía el ritmo necesario a una jugadora de Michigan, que mostró un desánimo poco característico, con poca frescura de piernas. La número uno incluso escuchó algunos silbidos de la grada, al considerar que no estaba empleando toda su energía.

Kvitova no se creía la cómoda victoria que estaba consiguiendo y dudó en el sexto juego al conceder dos oportunidades de quiebre. De la misma forma, con oportunidad para cerrar con 5-2 y saque, los nervios atenazaron a la vigente campeona de Wimbledon, que no pudo cerrar el encuentro ante una enrabietada Serena Williams. La número uno no estaba dispuesta a marcharse del encuentro con su peor versión y consiguió una rotura que la mantenía en el partido.

Pero fue un espejismo, Serena volvió a dudar con su saque y concedió un 30-40 que sería definitivo en el encuentro al estrellar un revés en la red para dejar vía libre a que Kvitova pudiera conseguir su segunda final del año. Esta nueva final la enfrentará a la rusa Svetlana Kuznetsova que dio otra sorpresa al eliminar a la vigente campeona, la rusa Maria Sharapova en dos mangas (6-2, 6-4).

La checa, que no estaba logrando buenos resultados en sus últimas citas, tendrá su segunda oportunidad en una última ronda en Madrid tras caer en la edición de 2011 ante la bielorrusa Victoria Azarenka. Esta será su segunda final de la temporada tras la de Sidney, donde se alzó con la victoria.