Una soberbia España buscará el oro mundial tras imponerse a Australia (12-10)

España disputará en Fukuoka ante Países Bajos la cuarta final del Mundial de waterpolo femenino de su historia. En semifinales, la selección superó a Australia (12-10) el rival ante el que hace diez años logró en Barcelona el único oro mundialista. Las otras dos finales del equipo nacional (Budapest 2017 y Gwanju 2019) acabaron con sendas platas.

El torneo de España empezó torcido con una derrota precisamente ante Países Bajos (7-6), pero desde entonces el grupo de Miki Oca ha sido imparable. El talento ofensivo del equipo se traducía en 80 goles en cinco partidos antes de la semifinal. La imponente presencia de las australianas, que sólo habían caído ante Estados Unidos, no intimidó a España que vivió un arranque de partido ejemplar. La hiperactividad defensiva ahogó a las "aussies" y en ataque aparecieron las boyas para mandar desde el principio. Maica García, Paula Leiton y Paula Camus mandaron por dentro y los cañones de Elena Ruiz y Judith Forca lo hicieron por fuera. España cobró una ventaja fundamental (4-1).

Sólo la catarata de superioridades de Australia mantuvo a las oceánicas en el partido. Cada ataque suyo acarreaba una expulsión en la defensa española, pero en ataque las ideas seguían igual de claras pese a que el partido pareció equilibrarse al descanso (8-6). Para volver a dominar, España recuperó el espíritu defensivo con el que arrancó la semifinal. El trabajo atrás permitió reabrir diferencias (10-6) y el equipo fue capaz de gestionarlo sobreponiéndose a los errores en ataque. Dio igual que no se aprovecharan las superioridades, tres se desperdiciaron en el tercer cuarto, porque el trabajo defensivo fue sobresaliente. Las australianas no fueron capaces de salir a flote y a medida que pasaban los minutos la bola cada vez pesaba más. Un gol de Maica García y el de Bea Ortiz a menos de dos minutos para la conclusión sellaron el pasaporte para una nueva final mundialista.

Países Bajos será el rival de España en la final del viernes después de imponerse a Italia por 9-7. Las neerlandesas regresan a la lucha por el oro mundialista ocho años después y en la semifinal fueron superiores a las transalpinas, que protagonizaron la gran sorpresa del torneo al cargarse a Estados Unidos, salvo en el 0-1. Iris Wolves y Lieke Rogge, con dos tantos cada una, fueron las máximas goleadoras de las "oranje".