Solo tiene 22 años y algo menos de 18 meses de experiencia en Europa, pero Santi Giménez es uno de los delanteros que llaman la atención fuera de las grandes ligas europeas. Los tres goles que marcó el pasado fin de semana en la Eredivisie lo confirman como la principal amenaza del Feyenoord antes de enfrentarse hoy al Atlético.

Los números lo confirman. Ha marcado 18 goles en 16 partidos esta temporada. Dos llegaron en la Liga de Campeones en los dos partidos que ha podido jugar. Arrastraba una sanción de la temporada pasada que le impidió participar en el debut contra el Celtic y en el primer duelo contra el Atlético en el Metropolitano.

«Es un jugador importante para nuestro rival, un delantero con gol, buen posicionamiento, mucha fuerza y que está bien ubicado casi siempre cuando el equipo progresa en ataque», avisa Simeone. Giménez ha mejorado su rendimiento respecto a la temporada pasada. Suma 41 goles en 61 partidos con la camiseta del Feyenoord y ya se le ha relacionado con el Atlético para la próxima temporada. El delantero es decisivo para el Feyenoord, aunque su entrenador, Arne Slot, prefiere descargarlo de responsabilidad. «Es igual de importante que cualquier otro jugador. Nosotros como equipo creamos ocasiones y si tenemos a un delantero como Santiago, con la confianza que tiene después de haber marcado tres goles el fin de semana, es bueno para nosotros», reconoce el técnico neerlandés.

«El objetivo para él y para nosotros es crear esas oportunidades de gol. Lo mejor que nos puede pasar es que si creamos una ocasión de gol Santi sea el último en tocar el balón. Él es quien tiene más facilidad para marcar de nuestro equipo. Si puedo escoger y estamos atacando, que el último toque sea de Santiago o de Ueda. Ellos dos son nuestros goleadores. Pero primero tenemos que crear ocasiones y no va a ser fácil contra el Atlético. Son muy fuertes en la ofensiva y en defensa», asume Slot, que ya estuvo cerca con su equipo de dar un susto al Atlético en el Metropolitano a pesar de la ausencia de Giménez.

Los tres goles ante el Excelsior fueron fundamentales para la victoria de su equipo (2-4), pero además lo sitúan más cerca de superar el récord de goles en un año natural en la Liga neerlandesa que tiene Luis Suárez. El uruguayo marcó 30 goles en un año con el Ajax; Giménez lleva 29 con un mes por delante de competición antes de que acabe este 2023.

Giménez marcó tres tantos en la última jornada a pesar de haber llegado prácticamente sin tiempo después de haber jugado con México en el parón dedicado a las selecciones. Regresó el jueves a Rotterdam después de algunos retrasos en sus viajes. «El viernes entrenamos. Le hablé el sábado para ver si había dormido bien y si estaba listo para jugar porque teníamos un partido complicado. Me dijo que durmió bien y que estaba listo para ayudar al equipo y fue exactamente lo que hizo», explica su entrenador.

Santi nació en Buenos Aires, pero es internacional con México. «Me siento más mexicano que argentino», ha dicho. En realidad, apenas vivió en su país de nacimiento. Se trasladó a México en 2004, cuando su padre, Christian Giménez, que también era futbolista, fue fichado por el Veracruz. Christian, que comenzó su carrera en Boca Juniors, hizo carrera en México, donde jugó en Pachuca y Cruz Azul, además de Veracruz, antes de regresar a Pachuca para retirarse. Para Santi, la elección de México como país futbolístico fue natural. Una elección de vida más que deportiva. Su padre también está nacionalizado mexicano.