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Zidane mima a Jesé
Zinedine Zidane, segundo entrenador del Real Madrid, cuida de primera mano la evolución de una de las joyas de la cantera del club madridista, Jesé Rodríguez, a quien mima con sesiones personales para mejorar las prestaciones del delantero del conjunto blanco.
Jesé cuenta con un técnico personal de lujo. En ocasiones, el genio francés, cuando acaban los entrenamientos del Real Madrid, comparte unos minutos con su futbolista para mejorar sus fallos y convertirle, con sus consejos, en un jugador de presente y no de futuro.
Es evidente que la explosión de Jesé se está produciendo en cada partido que disputa. Poco a poco, el joven jugador del Real Madrid se está convirtiendo en una realidad y el debate sobre una hipotética titularidad en el hueco que ocupa la estrella galesa Gareth Bale está sobre la mesa.
Pero Carlo Ancelotti y su cuerpo técnico quiere mimar a su jugador. Planifican para él sesiones de trabajo específicas y es Zidane el encargado de dirigirlas, como se vio esta mañana después del entrenamiento.
Se ha hecho también con otros como los franceses Raphael Varane y Karim Benzema. Pero "Zizou"también se encarga de "marcar"de cerca a Jesé. Hoy, durante cerca de veinte minutos, los dos trabajaron el disparo de volea. Zidane centraba y Jesé remataba.
Lo hicieron desde ambos lados, desde la derecha y desde la izquierda. Jesé disparó con las dos piernas, desde dentro y fuera del área. Estuvieron los dos solos, sin guardametas, con la portería vacía y únicamente con dos cámaras del club que captaron todas las imágenes para después analizarlas con tranquilidad.
Zidane hizo especial hincapié en la zurda de Jesé. Casi todas las pelotas fueron dirigidas a esa pierna, la más débil del canterano y con la que más trabajó el francés.
El delantero blanco está en muy buenas manos. Ancelotti lo sabe y, aunque cuida a todos sus jugadores por igual, parece que por Jesé siente debilidad. "Me sorprende la frialdad que tiene delante de la portería", declaró hoy en una reunión informal con la prensa. Jesé llama a la puerta del éxito, pero con tranquilidad. Poco a poco.
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