Polémica

La clara mano de Galán en el área del Atlético que el árbitro decidió no pitar

En el partido de LaLiga disputado en Mestalla, el colegiado ha ido al VAR, pero no ha señalado la mano de Galán

Javi Galan of Atletico de Madrid in action during the Spanish League, LaLiga EA Sports, football match played between Atletico de Madrid and RC Celta de Vigo at Riyadh Air Metropolitano stadium on February 15, 2025, in Madrid, Spain. AFP7 15/02/2025 ONLY FOR USE IN SPAIN
Galán, del Atlético, ha hecho una mano contra el Valencia que no se ha pitadoAFP7 vía Europa PressEuropa Press

En el partido entre Valencia y Atlético de Madrid, se produjo una jugada polémica en el minuto 55 que volvió a encender el debate sobre el criterio arbitral en LaLiga. Gayà centró desde la izquierda y Sadiq remató de cabeza, impactando el balón en el brazo de Galán dentro del área.

El árbitro Busquets Ferrer no señaló penalti en primera instancia, pero la acción fue revisada por el VAR. A pesar de las protestas de los jugadores del Valencia, con Rioja y Javi Guerra como los más insistentes, el colegiado mantuvo su decisión inicial tras recibir indicaciones desde la sala VOR.

Las repeticiones mostraron que el balón impactó en el antebrazo de Galán, que lo tenía separado del cuerpo a la altura de la cadera. La toma de vídeo parecía bastante clara, sugiriendo que la trayectoria del balón se dirigía hacia la portería defendida por Oblak. Sin embargo, el árbitro interpretó que no había voluntariedad ni un aumento significativo del volumen corporal, desestimando así la opción de penalti.

La decisión generó indignación en Mestalla, donde los aficionados del Valencia protestaron airadamente, convencidos de que el contacto con la mano era punible.

El contexto de la polémica arbitral en LaLiga añade más peso a la controversia. En las últimas semanas, el Atlético de Madridha estado particularmente activo en el debate sobre las decisiones arbitrales, en buena parte por la postura del Real Madrid, cuyas protestas han reavivado la discusión sobre el criterio con el que se aplican las manos dentro del área.

Este clima de tensión refuerza la sensación de que cada jugada es susceptible de ser interpretada desde el prisma del conflicto, con los clubes elevando su presión sobre los estamentos arbitrales en un campeonato donde el ruido en torno a las decisiones ha eclipsado, en demasiadas ocasiones, el propio juego..