Atlético de Madrid: Griezmann marca el camino rojiblanco

«Está mejor. El jueves se entrenó con normalidad. Hoy a la mañana se volvió a tratar. Está haciendo un esfuerzo muy grande por estar en el partido», decía ayer Simeone cuando le preguntaban sobre Griezmann. El delantero francés es la principal preocupación del Madrid, pero también del Atlético. Suyo fue el gol que derrotó a los madridistas en el Santiago Bernabéu la temporada pasada. Suya fue la culpa de que Zidane lo cambiara todo y se animara a protegerse con Casemiro en el centro del campo.

Griezmann sufrió un golpe en el pie izquierdo en el partido que jugó con su selección ante Suecia el pasado viernes. Francia no tenía más compromisos y el «7» rojiblanco regresó a Madrid para empezar a pensar en el derbi. El francés ha sido el máximo goleador rojiblanco desde que llegó al equipo. Ha marcado 22 goles en Liga en cada una de las dos temporadas que ha disputado a las órdenes de Simeone y su importancia ha ido creciendo, en el equipo y en su consideración dentro del orden futbolístico mundial. Es la estrella del Atlético y fue elegido el mejor jugador de la pasada Eurocopa, además de ganar la Bota de Oro.

Simeone siempre ha destacado su interés por seguir mejorando y su esfuerzo por crecer. No quiere el mérito de la evolución del jugador. «La clave ha sido tener la suerte de tener un futbolista que quiere mejorar, con mucho talento y que pueda ver las cosas que se le dicen», asegura. Un mensaje que ha enviado en más ocasiones y que ayer repitió en la sala de prensa del Vicente Calderón. Griezmann es el mejor jugador del equipo y un ejemplo para todos los que llegan por el esfuerzo que hizo para adaptarse a lo que necesita el Atlético de él. No tardó en comprender que la calidad no bastaba y que debía seguir el ritmo de sus compañeros. Primero, en los entrenamientos. Después, en el campo. Las sesiones físicas del profe Ortega eran una tortura para él en los primeros meses. Pero la época del sufrimiento ya pasó.

Evolucionó de la manera que no consiguieron evolucionar otros compañeros de equipo. No lo hizo Cerci, tampoco Jackson Martínez, ni Vietto, en el que el Cholo aún conserva esperanzas. Por eso se marchó cedido, y no traspasado, al Sevilla. Un camino que sí está siguiendo Gameiro. «Kevin está en crecimiento. Necesitamos de su calidad, de su juego asociativo y de su entendimiento con Griezmann», dijo ayer Simeone. El delantero fichado este año es el segundo máximo goleador del equipo esta temporada. Ha marcado cinco en Liga, sólo uno menos que Griezmann.