Guardiola y Gundogan le quitan la Liga al Liverpool

El Liverpool no fue capaz de aprovechar la oportunidad que le ofreció el Aston Villa, que llegó a ir ganando por 0-2 al Manchester City. Una victoria ante el Wolverhampton le daba la Liga al equipo de Jurgen Klopp, pero sólo consiguió ponerse por delante cuando el City ya había dado la vuelta al partido contra el Villa y daba igual su resultado.

Cash y Coutinho, que marcó un golazo con un control y un remate perfectos, complicaron la vida al City, que no parecía muy centrado en el partido que podía darle el título. En el banquillo del Villa se sienta una leyenda del Liverpool, Steven Gerrard, pero en cinco minutos el equipo de Guardiola encontró los tres goles que necesitaba para que Pep ganara su cuarta Premier en cinco temporadas.

Nada podía hacer ya el Liverpool, que también había comenzado perdiendo contra el Wolverhampton. A los tres minutos ya había marcado Pedro Neto. No tardó mucho en llegar el empate de Mané, pero no era suficiente a pesar del temporal tropezón de su rival. Allisson lo sostuvo en varias ocasiones, evitando el gol del Wolverhampton en algunos contraataques claros. Y cuando el Liverpool consiguió ponerse por delante ya no le servía para nada porque el City ya ganaba.

Arriesgó Klopp, que puso en el campo a Salah, a pesar de que no estaba en plenas condiciones físicas y el Liverpool tiene pendiente la final de la Liga de Campeones del próximo sábado contra el Real Madrid. El egipcio marcó el gol que confirmaba la remontada y Robertson consiguió el tercero.

Salah demostró que está recuperado para enfrentarse al Real Madrid. Tiene cuenta pendiente desde la final de 2018, de la que se tuvo que retirar muy pronto por una lesión en el hombro después de un forcejeo con Sergio Ramos. Y tiene más gamas que nadie de jugar la final de París. La recuperación de Salah contrasta con la lesión de Thiago, que se retiró antes del descanso por una dolencia muscular que pone en duda su participación en la final de la Champions.

En las gradas de Anfield algunos aficionados sintonizaban la radio y negaban con la cabeza asumiendo que esa Liga tampoco sería suya. Otros consultaban los resultados en el móvil, pero la reacción era la misma.

Ganó el Liverpool al Wolverhampton (3-1), pero la victoria del City ante el Aston Villa (3-2) le dejaba sin título. Dos de Gundogan y uno de Rodri confirmaron la remontada y nada que ver con lo que sucedía en la grada de Anfield con la reacción del público del Etihad.

Guardiola lloraba de alegría y la afición del City se lanzaba al césped para festejarlo con sus jugadores. Hasta rompieron el larguero de una de las porterías y los hinchas tuvieron que ser desalojados para que su equipo pudiera recibir el trofeo de campeón sobre el césped.

El Liverpool aspiraba a conseguir cuatro títulos esta temporada. Ya había ganado las dos Copas en Inglaterra, pero le ha faltado un punto para ganar la Liga. Ahora su único objetivo es la final de la Liga de Campeones para poder cerrar la temporada siendo campeón de las tres copas que disputa. El Real Madrid ya eliminó al equipo que le acaba de quitar la Liga.