Una ceremonia inaugural más propia de Eurovisión

¿Fue la ceremonia inaugural de la Eurocopa o del festival de Eurovisión? Entre las canciones y el colorido de la artista alemana Leony, del grupo estadounidense OneRepublic y del trío electrónico italiano Meduza, emergió en el tramo final la figura de Franz Beckenbauer, fallecido hace seis meses. Dos Mundiales, una Eurocopa, tres Copas de Europa y dos Balones de Oro merecían un homenaje mayúsculo. No lo fue la ceremonia inaugural, pero la aparición de Heidi, la mujer de Beckenbauer, Bernard Dietz y Jürgen Klinsmann, los capitanes de Alemania en las victorias de las Eurocopas de 1980 y 1996, con la Copa Henri Delaunay cambió el semblante del Allianz Arena. Alemania tuvo a tres representantes de los tres títulos que ha ganado y la grada ovacionó a los tres. Fue el aplauso más sentido de una ceremonia breve y poco intensa. OneRepublic, Leony y Meduza, lo intentaron con «Fire», el tema oficial del torneo, pero fue un quiero y no puedo.

Entre los tres dieron vida a una obra escrita por el miembro de OneRepublic Ryan Ryder y que cuenta con más de un millón de reproducciones en todas las plataformas, pero no conmovió a casi nadie. Hubo un espectáculo de bailes y colores en el que se despacharon varios temas, pero los hinchas lo que querían era oír los himnos cuanto antes.

La aparición de Beckenbauer en los videomarcadores sí fue emocionante y Heidi estuvo a punto de romper a llorar en la última victoria del «Kaiser».

Lo que no aportó la ceremonia inaugural se vivió durante todo el día antes del partido en Múnich. La ciudad fue una fiesta. Los estudios económicos sobre la Eurocopa apuntan que aportará unos mil millones de euros adicionales en ingresos a Alemania procedentes de turistas extranjeros, lo que equivale aproximadamente al 0,1 por ciento de la producción económica del segundo trimestre, según los cálculos del Instituto ifo. El investigador Gerome Wolf, señaló que en el Mundial de 2006 en Alemania tanto las llegadas como las pernoctaciones de huéspedes extranjeros aumentaron un 25 por ciento y si se aplica este dato a la Eurocopa «podemos esperar unos 600.000 turistas más y 1,5 millones de pernoctaciones adicionales durante el periodo de los partidos. Esto debería reflejarse en un aumento de los precios del alojamiento y del volumen de negocio en el sector de la hostelería», recalcó.

El analista recalcó no obstante que el efecto de la Eurocopa será «efímero», lo que significa que es probable que las exportaciones de servicios para los turistas volverán a caer tras el final del torneo en el tercer trimestre del año. La selección de Nagelsmann, ajena a esos cálculos, resolvió sin problemas el estreno ante Escocia y los aficionados alemanes se divirtieron bastante más que en una ceremonia olvidable.