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Así está el campo bravo: menos toros y más caros

La Unión de Toros de Lidia anunció una reducción del 20% de animales para esta temporada respecto a la anterior
TOROS DE VICTORIANO DEL RIOL Diaz

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Que estamos en la cuenta atrás para el comienzo de la temporada es una realidad. Una campaña que ya ha dado sus primeros coletazos, como lo fueron la Feria de Valdemorillo madrileña, con aquel llenazo y el faenón de Juan Ortega, que nos trae buenos presagios, porque el toreo cuando se hace así es un generador infinito de ilusiones. Luego vendrán otros tiempos para aterrizar en las realidades. En otras. Y para eso la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia celebró un desayuno informativo con el fin de ponernos los pies en el suelo sobre aquello que la entidad da cobijo: el centro de la tauromaquia, los toros bravos.
La Unión presentó los proyectos más relevantes en los que está trabajando y una de las cosas más importantes y que viene preocupando desde hace tiempo: la previsión del mercado bravo de la RUCTL para la temporada de 2024. Un lastre de la cabaña brava desde que la covid entrara en nuestras vidas, desde aquel marzo de 2020.
Lo cierto es que los datos que hizo oficiales son preocupantes al presentar una reducción de 20% de los machos útiles (4 y 5 años) respecto la temporada del 23, es decir, en tan solo un año.
En el encuentro que tuvo lugar en la propia sede de la entidad, el presidente, Antonio Bañuelos, acompañado por el tesorero, Rafael Iribarren, el directivo Ricardo del Río, la directora de comunicación y relaciones institucionales, Lucía Martín, el director técnico, Juan Villalón, y la técnico coordinadora de proyectos, Laura Landeta, analizaron la situación de censos de este sector y los efectos que los incrementos de costes de materias primas y servicios han tenido sobre ellos.
En ese sentido, Bañuelos dio cuenta de que en la RUCTL «se ha producido una disminución de un 25% de reproductoras con respecto a 2019», y destacó la importancia de «la reducción de un 20% de toros útiles en la RUCTL para la temporada de 2024 respecto a 2023 (reducción de casi un 33% si ponemos como referencia la temporada de 2022).
Este dato tiene un análisis profundo por las consecuencias que conlleva a corto y medio plazo, como explicó Bañuelos: «Es una llamada de atención para la oferta ganadera en la actualidad y en los próximos años».
A esta cuestión se le suma otra no menos importante que son el elevadísimo aumento de los gastos en las ganaderías. «Los gastos de gestión de las ganaderías han aumentado desde 2018 en más de un 40% como consecuencia de la gran sequía que viene sufriendo España, así como el conflicto Rusia-Ucrania, la epidemia del EHE, el incremento del precio de las materias primas por la rotura de stock de la pandemia», según argumentó.
A pesar de ello y aunque parece que el mensaje es alarmante, los directivos aseguraron que: «tras muchos años de esfuerzo y selección, la oferta por fin se ajusta a la demanda».
Por otro lado, se trasladaron los proyectos en los que se encuentra inmersa la institución, tales como la digitalización de la entidad, la defensa del bravo en las Instituciones Europeas, concretamente, en la reforma del Reglamento de Transporte y Bienestar Animal que se está abordando actualmente en el seno de la Comisión. También se quiso informar sobre el próximo acto de presentación de la nueva identidad corporativa de la Unión, que tendrá lugar el próximo 20 de marzo en Madrid.