Economía
Juan Roig, presidente de Mercadona, sobre la situación política: "Si esto pasase en Portugal, donde estamos en expansión, ralentizaríamos las inversiones"
Afirma que los empresarios "necesitamos tranquilidad y que no nos pongan palos en las ruedas"
El presidente de Mercadona, Juan Roig, se ha pronunciado este jueves sobre cómo afecta la situación política actual a la economía española. Ha recordado que los "trabajadores y empresarios somos los que generamos riqueza y lo que necesitamos es tranquilidad y que no nos pongan palos en las ruedas". El empresario ha asistido al chequeo semestral que la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) celebra semestralmente sobre el estado de ejecución de las obras del Corredor Mediterráneo.
El acto, previsto en Madrid desde hace meses, ha coincidido con la votación en el Congreso de los Diputados de la investidura de Pedro Sánchez, un asunto que ha empapado la jornada a la que han asistido 1.800 empresarios además de autoridades de las autonomías afectadas por este eje ferroviario, con la excepción de Cataluña.
El empresario, ha realizado una seria advertencia sobre cómo puede afectar la situación actual a las inversiones empresariales. "Si este mismo problema que tenemos en España lo tuviéramos en Portugal, en donde Mercadona está en plena expansión, ralentizaríamos las inversiones, y eso no puede ser".
Así, ha lamentado que se esté produciendo un "enfrentamiento entre los españoles, y se está medio consiguiendo y eso no es bueno ni para España, ni para la economía ni para nadie".
Sobre el Corredor Mediterráneo ha recordado que pese a que los territorios por lo que pasa esta infraestructura acaparan el 50 por ciento del PIB, su construcción "va más lenta que el caballo del malo".
El malestar de los empresarios por el pacto alcanzado con Sánchez con los independentistas ha quedado reflejado en el discurso que ha dado el presidente de AVE, Vicente Boluda. "Como todos podéis comprender, el acto de hoy está convocado hace más de 8 meses, pero el destino ha querido que coincida con el debate y votación para la investidura del presidente del Gobierno de España".
Ha dicho que en estos ocho años de andadura del movimiento #QuieroCorredor se han vivido muchos momentos delicados a nivel político, sanitario, geoestratégico, económico y social, que todos tenemos en la cabeza. La incertidumbre no solo no ha cejado, sino que ha ido en aumento. "Pero no por ello, como sociedad civil, hemos parado de asumir responsabilidades ni de seguir reivindicando lo que consideramos que es relevante para la marcha de nuestro país, ya sea en materia de competitividad, de educación o de infraestructuras".
Sin embargo, ha destacado que en el momento actual los pactos de gobierno alcanzados permitirán nombrar presidente del Gobierno al candidato del PSOE que, para gobernar, ha alcanzado acuerdos con partidos que abiertamente han dicho que o bien quieren acabar con nuestro modelo de convivencia, "o bien han declarado su rechazo a pertenecer a nuestro país". Así, ha dicho respetar la legalidad de los acuerdos, pero "sí rechazamos de plano someter a nuestro país a unos acuerdos de investidura que claramente atentan contra dos de los pilares básicos de nuestro modelo: la igualdad de todos los españoles ante la Ley y el respeto a la separación de poderes.
Boluda ha calificado de "deriva destructiva y divisiva" la situación actual a la que los empresarios no se resignan a ser meros espectadores, "nos rebelamos contra el intento de privarnos de opinar sobre un asunto en el que, equívocamente, se pretende hacer ver que solo tienen capacidad de actuar, opinar y decidir los políticos". Es más, ha reivindicado que los pactos pueden hipotecar nuestro futuro y pueden atentar contra pilares básicos de nuestro estado de derecho como son la separación de poderes y la igualdad entre todos los españoles.
Por tanto, ha reclamado que se debería someter el pacto de investidura a una consulta a la ciudadanía sería lo más acertado y, de esta forma, el Gobierno conocería la opinión de la mayoría de los ciudadanos a la hora de afrontar los compromisos derivados de los pactos alcanzados.