Podem tensa al Consell al pedir una condena por la actuación policial

Prácticamente en el mismo momento en el que la vicepresidenta y portavoz del Consell, Mónica Oltra, comenzaba la rueda de prensa para informar de los asuntos tratados en el pleno del Consell, Unides Podem emitía un comunicado desvelando uno de los asuntos tratados. «Rubén Martínez Dalmau, vicepresidente segundo de la Generalitat, ha defendido el derecho a manifestación y la libertad de expresión. Un gobierno como el Botànic no puede tolerar ningún tipo de violencia hacia la ciudadanía».

El comunicado, que se producía tras los graves disturbios provocados la noche del jueves durante la concentración convocada de apoyo al rapero Pablo Hasél, remarca que todas las instituciones públicas tienen que defender el derecho de la manifestación.

Ni siquiera la mascarilla evitó que se percibiera la cara de enfado de Oltra al escuchar esta pregunta. «Se ha producido una reflexión al respecto, pero las deliberaciones son secretas».

La vicepresidenta no quiso profundizar ante los medios de comunicación en las diferencias que hay sobre este asunto en un Consell donde dos de los tres partidos que lo componen, Compromís y Unides Podem, han tenido participación activa en las protestas reprimidas por la delegada del Gobierno, Gloria Calero, que pertenece al PSPV, la fuerza mayoritaria del Botànic.

Según ha podido saber LA RAZÓN, fue la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, la que contestó al vicepresidente Dalmau. Argumentó la necesidad de esperar a los informes sobre los hechos remarcando que desde el Consell no se puede lanzar una condena a las Fuerzas de Seguridad cuando no existe un informe oficial de la realidad de los hechos e insistió en que los pronunciamientos que se hagan en este sentido deben hacerse a título personal.

Desde Compromís, se insistió en que los cuerpos y fuerzas de seguridad actúan con mayor contundencia cuando los manifestantes son de izquierdas y, por el contrario, son más comedidos cuando son de derechas

Pandemia y manifestaciones

Oltra admitió que este tipo de concentraciones «no son buenas para la pandemia», pero defendió que se debe ponderar el ejercicio de los derechos fundamentales con las restricciones y «eso es lo que se está evaluando». No obstante, no tuvo más remedio que admitir que cualquier aglomeración de gente está contraindicada en una pandemia.